En España, uno de cada 10 personas con coronavirus fallece. En la provincia de Cádiz, la media es inferior, del 8%. Sin embargo, en 13 municipios, esa media es superior. Se trata de las localidades de Algodonales, Olvera, Conil, Tarifa, Prado del Rey, Arcos, Los Barrios, Alcalá del Valle, Jimena, Chiclana, Jerez, Rota y Algeciras, por ese orden.
La letalidad en Algodonales es del 50%, y la de Algeciras, del 11%, frente al 10% nacional. Esto se explica por varios motivos. El primero, que en algunas poblaciones hay menos de 10 contagios, por ejemplo, y es más probable que se den desviaciones. En el caso de Algodonales, con solo dos, la posibilidad es que la letalidad sea del 0, el 50 o el 100%. Además, el caso de Algeciras también es asimilable, con un solo punto de diferencia.
Pero eso también significa que donde hay un número significativo de positivos (Alcalá del Valle, Chiclana, Jerez y Rota), lo cual tiene otras explicaciones. Porque si hay 13 que están por encima de la media, 25 están por debajo. Esto tiene que ver con el número de casos diagnosticados. Veamos.
El coronavirus es el mismo en todo el mundo, sin apenas diferencias de letalidad entre las cepas encontradas. No hay ningún estudio concluyente que apunte a una mayor predisposición genética por territorios. La letalidad, así, se explica que sea mayor porque el coronavirus haya golpeado en mayor medida a poblaciones de riesgo (en concreto, residencias de ancianos, con focos en Alcalá del Valle y Jerez) y/o porque aún sólo afloran en ciertas localidades los casos más graves.
Otro factor que explica que un territorio tenga una letalidad mayor es que, como se ha dicho, siendo el mismo coronavirus en todas partes, la cifra que está distorsionada es la de personas verdaderemente afectadas: positivos no diganosticados, asintomáticos, en personas que cursan la enfermedad apenas sin enterarse o que simplemente no han logrado practicarse un test.
Por otra parte, hay otras tres poblaciones con un número significativo de positivos con una letalidad muy baja. Primero, Sanlúcar, con 32 positivos y 0 muertes. En el caso de Trebujena, también nula, con cero muertes entre 20 contagios, pero muchos de ellos entre gente joven que trabaja en centros sanitarios. Le sigue El Puerto de Santa María, con una muerte entre 55 positivos; Ubrique, con una muerte entre 48 y Cádiz, con 5 muertes de entre 158 positivos diagnosticados. Puede significar, primero, que haya habido suerte y menos personas con complicaciones de la enfermedad. Pero también que los focos sean más conocidos, haya un mayor porcentaje de positivos conocidos respecto a los infectados reales y que, como se sospecha, la verdadera letalidad del virus no se acerque al 10% y sean estas las localidades donde mejor se conozca cómo es de dañino en realidad.
La clave para despejar las dudas de la letalidad es que se conozca de forma aleatoria, a través de test al azar, cuántas personas han pasado ya la enfermedad. Es un estudio que va a poner en marcha el Gobierno. Eso revelará muchos positivos asintomáticos o de curso leve. Y hará que la media nacional y de muchas localidades vaya bajando, para tender a que, en todas partes, por lo general, el porcentaje de letalidad se iguale.