La venta ambulante sin autorización y sin controles sanitarios en las playas está en el foco. La Policía Local de los municipios andaluces vigila para que no haya infractores que puedan poner en riesgo la salud de los usuarios. En Málaga, los agentes han denunciado a cinco personas que estaban elaborando y comercializando mojitos caseros sin permisos.
Según indica el Cuerpo en una nota, los denunciados suelen colocar una sombrilla y una toalla, sobre la que depositan todos los utensilios e ingredientes necesarios para la fabricación de esta bebida, sin ningún tipo de refrigeración ni conservación adecuadas.
Los policías han intervenido todos los utensilios necesarios para la preparación y distribución de las bebidas, entre ellos, vasos, bandejas metálicas, alcohol, azúcar y fruta.
Recuerdan que la venta ambulante no autorizada de productos alimenticios en el litoral constituye una infracción grave a la Ordenanza de Playas del Ayuntamiento de Málaga, que conlleva una sanción que va desde los 300 hasta los 3.000 euros. La cuantía exacta se determina en función de la reincidencia e intencionalidad del autor; y la mayor o menor perturbación causada por la infracción en el medio ambiente y/o en los usuarios.
Este tipo de actuaciones se desarrollan en el marco del dispositivo especial que está llevando a cabo la Policía Local para combatir la venta ambulante no autorizada en el litoral y para garantizar la seguridad en las playas. La Policía Local alerta del riesgo que puede suponer para la salud el consumo de alimentos o bebidas no sometidos a ningún tipo de control.