La Consejería de Sanidad, Presidencia y Emergencias, a través del Servicio Andaluz de Salud (SAS), ha adjudicado oficialmente la construcción del nuevo Hospital de Málaga a la UTE Sando-OHLA-Vialterra, un proyecto valorado en 543,3 millones de euros, considerada la mayor obra sanitaria de Andalucía en décadas. El plazo de ejecución será de 75 meses, e incluye también la concesión y explotación de los aparcamientos, cuya gestión se extenderá durante 23 años desde el inicio de los trabajos.
El consejero, Antonio Sanz, ha destacado que se trata de un hito que refleja la “apuesta decidida del Gobierno andaluz por transformar la asistencia sanitaria en Málaga tras años de abandono”. Según ha explicado, la adjudicación llega tras un riguroso proceso de evaluación que ha valorado criterios técnicos, económicos, de sostenibilidad, innovación (I+D+i) y planificación financiera.
Un hospital diseñado para el futuro de la salud en Málaga
El SAS recibió tres propuestas dentro del plazo previsto, resolviendo finalmente a favor de la UTE adjudicataria por reunir la mejor solvencia técnica y económica, con un modelo ajustado a los requisitos exigidos. La financiación proviene mayoritariamente de fondos europeos FEDER (85%), mientras que el 15% será aportado por la Junta de Andalucía.
Sanz ha subrayado que esta infraestructura responde a un compromiso cumplido del Gobierno andaluz y supone un salto de calidad en la atención sanitaria. “Trabajamos con hechos: más inversiones, más profesionales y más infraestructuras”, ha remarcado.
Una infraestructura sanitaria de referencia con enfoque humano
El futuro Hospital de Málaga contará con 815 habitaciones, 48 quirófanos, 80 camas de UCI, un área de Urgencias con 31 consultas médicas, 8 de enfermería y 61 camas de observación, 158 consultas externas médicas y 38 de enfermería, y una zona específica para docencia e investigación
El diseño ha sido concebido bajo criterios de humanización, accesibilidad y confort, favoreciendo el bienestar de pacientes y familias, con espacios pensados para una atención sanitaria moderna, eficiente y cercana.
El consejero ha recalcado que este proyecto “transformará en profundidad la capacidad asistencial de la provincia, con una visión de presente y futuro”, situando a Málaga como referente sanitario nacional.