La consejera de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda, Rocío Díaz, y la alcaldesa de Jerez, María José García-Pelayo, han visitado este miércoles la nueva vía ciclopeatonal de la A-2003, que conecta Jerez de la Frontera con La Barca de la Florida. La infraestructura, demandada durante 17 años por vecinos y plataformas locales, ha supuesto una inversión de 5,3 millones de euros, cofinanciados con fondos europeos Next Generation.
"Por fin tenemos 24 kilómetros de camino seguro, una reclamación histórica de este entorno", destacó Díaz, quien subrayó el papel del "diálogo" y la "escucha activa" del Gobierno de Juanma Moreno y del Ayuntamiento de Jerez para materializar el proyecto. La consejera recordó que la iniciativa había sido postergada durante casi dos décadas pese a las peticiones reiteradas de los colectivos ciudadanos.
La vía, ya en uso, ha revelado una necesidad no prevista inicialmente: la iluminación nocturna, dada su frecuente utilización en horarios sin luz natural. Díaz anunció que la Junta ha licitado ya una partida de 200.000 euros —procedentes de fondos FEDER— para instalar alumbrado en el tramo entre Jerez y Estella. "Era una reclamación pendiente que hoy podemos resolver", afirmó.
La alcaldesa García-Pelayo celebró la culminación de un proyecto "que demuestra cómo la colaboración institucional da frutos". Agradeció especialmente la perseverancia de los vecinos y la plataforma promotora, cuyo seguimiento "ha sido clave para no dejar caer esta demanda en el olvido".
La infraestructura, que discurre paralela a la carretera autonómica, ofrece un carril bici protegido y aceras peatonales, mejorando la seguridad vial en una ruta tradicionalmente conflictiva. Según datos de la Junta, el trazado registra ya un uso intensivo, especialmente por parte de ciclistas y corredores.
Más puntos de descanso y fuentes públicas
El diseño incorpora medidas de accesibilidad universal y vegetación autóctona en los márgenes. No obstante, la plataforma vecinal ha pedido que se amplíen los puntos de descanso y fuentes públicas, solicitudes que la consejera se comprometió a "estudiar en futuras fases".
El acto sirvió también para destacar el impacto económico del proyecto, que ha generado 45 puestos de trabajo directos durante su ejecución. La obra ha incluido la renovación de drenajes y la estabilización de taludes en zonas con riesgo de erosión.
Con la próxima instalación del alumbrado —cuya adjudicación se resolverá en tres meses—, Jerez cierra un capítulo de demandas ciudadanas largamente postergadas. La consejera Díaz lo resumió así: "Hoy estamos de enhorabuena. Esto es el resultado de trabajar escuchando".
