"Seguimos adelante, no vamos a parar hasta que no lo consigamos", dice muy decidida al otro lado del teléfono Adela Escalante, miembro de la gestora de la asociación de vecinos Coloma, que aglutina a comunidades de propietarios y vecinos de la zona de la avenida de México, plaza del Caballo, calle José Cádiz Salvatierra y algunas aledañas. El objetivo que se planten es claro: que se deje de ejercer la prostitución en la zona.
El problema no es nuevo, ni mucho menos. Hace muchos años que, en supuestos locales de copas, se ejerce la prostitución, unas veces de forma más disimulada que otras. La Policía Nacional, de hecho, precintó varios locales en los que se encontraban 21 hombres de distintas edades, y 18 mujeres trabajando en su interior, en una operación conjunta con la Policía Local, la Inspección de Trabajo y técnicos municipales de disciplina urbanística del Ayuntamiento de Jerez.
La Policía Nacional, en la nota de prensa emitida tras las detenciones, aseguraba que en el interior de los locales precintados de la avenida de México "se ejerce la prostitución encubierta", y además "presentan un alto grado de conflictividad en cuanto a la concurrencia de reyertas y agresiones". Las peleas son habituales cada cierto tiempo. "El ambiente se está poniendo cada vez peor, hasta hubo una vez peleas con armas de fuego", recuerda Adela Escalante, en declaraciones a lavozdelsur.es.
La asociación de vecinos Coloma, que engloba diversas comunidades de propietarios del entorno de la avenida de México —"y cada vez más", matiza Escalante—, se plantea llevar a cabo diversas acciones, entre las que se encuentran concentraciones periódicas, con el objetivo de "solucionar de forma definitiva todos y cada uno de los problemas de esta zona de nuestra ciudad y, en particular, el problema de bares y locales". De momento, tienen previstas reuniones con el Ayuntamiento y con grupos de la oposición.
El PP jerezano, tras una reunión reciente, se comprometió a llevar a pleno una petición para que se ponga en marcha una "ordenanza de convivencia que elimine estos puntos de prostitución tanto en el entorno de la Avenida de México, como en otros puntos como Montealto, y que haga de Jerez una ciudad 0,0 de explotación sexual". Antonio Saldaña, portavoz popular, apuntaba que está dispuesto a "presionar a los gobiernos de Mamen Sánchez y de España”, con independencia de "las acciones que lleven a cabo los vecinos para visibilizar el problema de convivencia y seguridad".
"Dejaremos los cortes de calles para cuando pasen las restricciones", cuenta Adela Escalante, miembro de la gestora de la asociación de vecinos Coloma. "Durante la nueva normalidad pensábamos que estos locales iban a estar cerrados por la noche", señala, "pero cambiaron de licencia y si daban comida podían abrir, por lo que colocaron un cartel diciendo que daban meriendas y estaban las chicas en la puerta desde las cuatro de la tarde". Escalante señala que "es verdad que cierran las puertas a su hora, pero sigue habiendo actividad en el local".
El confinamiento en la zona, asegura Escalante, "fue una bendición", ya que "los bares cerraron", pero volvieron a la actividad una vez se levantaron las restricciones. "Hemos tenido peleas en la calle a menudo y se ve a chicas con poca ropa en la puerta de los locales... aquí hay centros escolares, academias, guarderías o un instituto". "Estaremos protestando hasta la saciedad, hasta que haya una normativa y se saque la prostitución de las calles", adelanta. "Con voluntad se puede hacer, como ha pasado en otras ciudades".