“Será un año lo más plano posible”. Así lo señala a lavozdelsur.es el presidente de la Unión de Hermandades, Jose Manuel García, en cuanto a lo que prevé para el nuevo curso cofrade. El actual se cierra en junio para en septiembre, como es costumbre, iniciar el nuevo ejercicio.
Para 2026, García Cordero ha venido adelantando algunas de las ideas que se acometerían en el nuevo curso como recuperar la calle Cruces para la Carrera Oficial y, por extensión, José Luis Díez y el Arroyo. También aventuró un evento extraordinario que podría implicar algún paso en la calle.
Este era el encuentro nacional de jóvenes cofrades al que se ha renunciado al dejarse pasar los plazos previstos para optar a su celebración en Jerez. “Ya no hay ideas. No nos embarcamos en nada. Todo se ha parado en seco”, afirma de forma tajante García Cordero. Es su previsión para 2026, el año en el cumple su mandato y en el que para el verano habrá elecciones a presidente.
"No nos embarcamos en nada. Todo se ha parado en seco”
¿Estamos ante una actitud ‘protesta’ o es un reflejo de los ánimos que hay en Curtidores? Ciertamente, el presidente y por ende su equipo, se están enfrentando a situaciones complicadas a la vez que polémicas que merman las ganas de hacer cosas, es decir, el ímpetu emprendedor se ha diluido.
Ahora se enfrenta a la investigación abierta por el Obispado sobre de lo sucedido el Lunes Santo. Ya ha comparecido en la Delegación de Hermandades. Tampoco ha conseguido cerrar las cuentas de la Magna y da la impresión que Bertemati se ha puesto de perfil.
En cuanto a la historia de La Cena, La Paz y La Viga, explica que se ha aportado el informe elaborado por el Consejo. No opina sobre la intervención del Obispado en un asunto que en teoría compete al organismo que preside, aunque sí deja caer que “en la Unión de Hermandades no tenemos régimen sancionador. Solo el Obispado puede hacerlo”.
Las cuentas de la Magna
El pasado martes se celebró un pleno de hermano mayores exclusivamente dedicado a rendir cuentas de la Magna de octubre en lo económico. Según informó el presidente se presentaron las cuentas a los hermanos mayores, pero no se votó “fue informativo. Las cuentas definitivas se darán conocer en junio con las del ejerció del año”.
Las hermandades han recibido 4.000 euros de subvención por participar en el evento. Aún restan 1.000 euros para alcanzar los 5.000 comprometidos: “estamos a la espera de una cantidad para repartir 500 euros más, pero el objetivo es alcanzar la cantidad acordada y presupuestada”.
Aclara que los actos paralelos se han autofinanciado con patrocinios y que aún resta liquidar la totalidad de la venta de las sillas con la empresa que la gestionó, “al final, a las hermandades no les ha costado nada el evento”.
A su juicio, “fue una celebración que tuvo sus contratiempos desde el principio”, señalando la decisión de integrar a todas las hermandades en vez de mantenerse la idea primigenia de que fueran solos las dolorosas con palios y alguna más por su especial valor devocional y artístico.
“Lo importante es que se cumplió el objetivo de que la Virgen estuvo en la calle”, destaca el presidente, quien al mismo tiempo considera que “ya se han dado las cuentas muy detalladas a los hermanos mayores para que las estudien con tiempo por delante hasta la cita de junio”.
Los 'recortes' del Obispado
Si la Unión de Hermandades adelanta un ejercicio con nula actividad extraordinaria, hay que sumar la percepción de que desde el Obispado se ha echado el freno a la ‘manga ancha’ que ha mostrado en todo lo excepcional: procesiones extraordinarias y eventos similares.
Un hecho que señala este nuevo rumbo es lo sucedido con la Hermandad de las Angustias, al que no se le autorizó una procesión extraordinaria por los 100 años de su reorganización, a lo que se une la prohibición de la salida ‘misional’ de la Virgen de la pasada semana.
Incluso se apuntan otras situaciones como el traslado de las imágenes del Consuelo desde las Viñas a la capilla de las Hermanas de la Cruz, donde residen eventualmente al estar en construcción la nueva capilla. Algo similar parece sucede ven El Amor en su traslado al convento de Santa Rita para continuar con los trabajos en la capilla de la hermandad.
¿Qué está sucediendo en Bertemati? Lo que sí se pone en evidencia es que la mano blanda pasó a la historia, algo sobre lo que ni el obispo ni la curia ni la delegación de cofradías se han pronunciado sobre una situación que es más que evidente.