Tecnología punta en la vendimia jerezana

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El grupo bodeguero Estévez invierte 1,5 millones en la planta de recolección para mejorar la calidad de los procesos de producción de sus vinos: software a la última y nuevos depósitos de fermentación controlada, entre otras novedades.

El grupo bodeguero José Estévez, compuesto por las bodegas de Real Tesoro, Valdespino y La Guita, ha realizado una inversión de un millón y medio de euros en la planta de vendimia para mejorar la calidad de los procesos de producción de sus vinos. Además de aumentar el número de depósitos autovaciantes y de prensas neumáticas, la planta de fermentación ha sido rediseñada y dotada de un software de última tecnología y de nuevos depósitos de fermentación controlada que elevan la capacidad de su vendimia en más de 7.000 botas. José Estévez SA posee 800 hectáreas de viñedo en el Marco de Jerez, un 12% del total controlado por la denominación de origen, "lo que le convierte en el mayor viticultor del Marco y de Andalucía", señalan desde el Grupo.

"Este dato pone de manifiesto el interés e importancia que la bodega otorga al viñedo como pieza fundamental dentro de su filosofía de trabajo, apostando por el origen y la singularidad de un terruño que es único en el mundo". José Estévez es la única bodega del Marco que utiliza el 100% de materia prima procedente de la Denominación de Origen Jerez y Manzanilla de Sanlúcar, es decir, uva y alcohol para fortificación de los mostos, para toda la producción de sus manzanillas: La Guita y La Bailaora, los finos: Tío Mateo, Inocente y Fino Tesoro, y también para el amontillado Tío Diego. "Este compromiso está ayudando a conseguir una cadena agroalimentaria sostenible en la que la viña está perfectamente integrada, generando riqueza, diferenciación con otros vinos de la zona, además de contribuir a la mejoras de la imagen del vino de Jerez". 

Según la empresa, estas importantes inversiones suponen además de un aumento en la capacidad de recepción diaria de uva, la posibilidad de comenzar los procesos de trazabilidad de sus vinos desde el viñedo, clasificando los mostos por los distintos pagos donde se encuentra el viñedo, aumentándose el control sobre los procesos productivos aplicados a la selección de la uva. "La sanidad y la graduación de la uva son parámetros claves para el destino y el precio que paga por la uva que compra". También ha sido instalado un nuevo pavimento en la planta de fermentación que aumenta los niveles de higiene de las instalaciones. "Este desarrollo tecnológico responde a los exhaustivos y exigentes parámetros de control de la compañía para obtener vinos de una excepcional calidad convirtiéndolos en referentes del jerez". 

La compañía prevé una vendimia "de muy buena calidad". Desde la bodega se espera racimos más pequeños, con un peso de grano de uva ligeramente más bajo, lo que unido a las pérdidas producidas en Trebujena y Sanlúcar como consecuencia de las enfermedades que se produjeron esta primavera, darán una cosecha de toda la denominación de origen un 10% menos que la del pasado año 2015.

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