Era la intención del director pero hasta hoy no se ha hecho oficial. El largometraje Techo y comida, dirigido por el jerezano Juan Miguel del Castillo, ha sido seleccionado para la sección oficial del próximo Festival de Cine de Málaga
Era la intención del director pero hasta hoy no se ha hecho oficial. El largometraje Techo y comida, dirigido por el jerezano Juan Miguel del Castillo, ha sido seleccionado para la sección oficial del próximo Festival de Cine de Málaga, tal y como se ha dado a conocer este mediodía en la rueda de prensa ofrecida en el Ayuntamiento malagueño. La 18ª edición del Festival se celebrará del 17 al 26 de abril y contará con el film de dirección jerezana y producción catalana que lleva a la gran pantalla el drama de los desahucios.
El rodaje de Techo y comida terminó en diciembre y ya por entonces Juan Miguel del Castillo y todo el equipo mostraban su idea de presentarla al Festival de Málaga para que fuera en la capital de la Costa del Sol donde se estrenara oficialmente el film, que está protagonizado por Natalia de Molina, Goya a la Mejor Actriz Revelación en 2014 por su papel en Vivir es fácil con los ojos cerrados. De Molina interpreta a Rocío, una joven madre en paro, sin ingresos, que vive con su hijo de ocho años en un piso alquilado, y que debe varias mensualidades. La trama refleja el "drama social" que supone para muchas familias enfrentarse a un desahucio, en lo que el director define como un cine "incómodo" pero al que quería dar voz a través de la gran pantalla.
Además de Natalia de Molina, también intervienen actores como Mariana Cordero, Gaspar Campuzano (cofundador del grupo de Teatro La Zaranda), Mercedes Hoyos, María Duarte, Montse Torrent o el pequeño Jaime López, que interpreta a Adrián, el hijo de Rocío, en la que es una historia "conmovedora, tierna y dura al mismo tiempo", como la define la propia web del Festival de Málaga. "¿A nosotros quien nos rescata?", se pregunta Rocío en la película. Una pregunta que tiene difícil respuesta. La película ha salido adelante gracias a la apuesta de la productora catalana Diversa Audiovisual y a las aportaciones de micromecenas, que aportaron unos 25.000 euros en apenas 40 días.