La aprobación definitiva de la nueva ordenanza que regulará la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) en el centro histórico de Jerez era uno de los puntos calientes del último pleno del verano en el Ayuntamiento, pero se ha repetido el guion de cuando se elevó para su luz verde inicial, a finales de enero pasado.
El grupo popular, que sustenta al gobierno municipal, y el grupo socialista, del que emanó la propuesta pergeñada en el anterior mandato —cuando era alcaldesa Mamen Sánchez—, han votado juntos la validación definitiva de una norma que divide el centro en dos áreas restringidas al tráfico motorizado particular, si bien una de ellas prácticamente no tendrá afectación ya que su activación está vinculada a que se disparasen los niveles de polución y así lo decretase la Junta de Andalucía, algo que hasta la fecha nunca ha sucedido en el municipio.
"Estamos en el centro, en la virtud"
Lo más llamativo del debate ha estado, teniendo en cuenta que PP y PSOE han ido de la mano en la iniciativa, en las posturas antagónicas que han mostrado Vox y La Confluencia, y que han permitido que el segundo teniente de alcaldesa delegado de Servicios Públicos, Sostenibilidad y Movilidad, Jaime Espinar, haya manifestado que "estamos donde queríamos, en el centro, en el término medio donde está la virtud". "La ZBE en Jerez no limita la movilidad de las personas, no hay más restricciones", ha insistido el dirigente popular.

Si Vox ha votado en contra de la ordenanza porque constriñe "la libre circulación de las personas", La Confluencia se ha abstenido por que, a su modo de ver, "es una oportunidad perdida para ampliar la superficie peatonal de la ciudad".
"A la ciudad le viene haciendo falta valentía política desde hace mucho tiempo"
En un punto del encontronazo, el portavoz de La Confluencia, Raúl Ruiz Berdejo, ha mantenido: "Si de Vox dependiera volveríamos a ver coches por la calle Larga; era una oportunidad y ha vuelto a faltar valentía política, que es lo que le viene haciendo falta a esta ciudad desde hace mucho tiempo".
"¿Peatonalizar Madre de Dios o la Avenida? Menos mal que no están gobernando ustedes", ha arremetido el portavoz de Vox, Antonio Fernández, estirando como un chicle la argumentación que momentos antes había ofrecido Ruiz Berdejo.
Como cierre del debate, una vez más ha intervenido la alcaldesa, María José García-Pelayo, para subrayar el mensaje político que quería colocar su ejecutivo sobre un asunto que prevé entrar en vigor de forma progresiva a la vuelta del verano. "Conciliamos una ciudad limpia y saludable sin perjudicar a los vecinos", ha defendido.
La Zona de Bajas Emisiones de Jerez ya tiene fecha
Jerez tendrá por fin su Zona de Bajas Emisiones (ZBE) a partir del próximo otoño, aunque con un retraso de hasta tres años desde la primera fecha establecida por la normativa europea. Con la aprobación definitiva de la ordenanza que regulará su puesta en marcha, se establecerán limitaciones al tráfico motorizado y controles por cámara en el centro histórico.
El retraso en su implantación no es exclusivo de Jerez, ya que la mayoría de municipios españoles con más de 50.000 habitantes han postergado la aplicación de esta medida, obligatoria según la Ley 7/2021 de Cambio Climático y Transición Energética. Una primera moratoria del Gobierno central y el contexto electoral de 2023 retrasaron la cuenta atrás.
La ZBE no solo busca reducir emisiones, sino también recuperar espacio urbano para el peatón. Aunque la legislación marca la obligatoriedad, deja libertad a los municipios para delimitar y regular sus áreas. En Jerez, eso se traduce en nuevas señales, pilonas, zonas de calmado de tráfico y redistribución del aparcamiento regulado, pero no en más restricciones que las que tradicionalmente se han mantenido en vías como Tornería, Pozuelo, José Luis Díez, entre otras calles del Jerez intramuros.
Dos zonas diferenciadas según los niveles de tráfico y contaminación
El nuevo mapa de movilidad de Jerez delimita dos áreas dentro de la ZBE. La zona 1, siempre restringida al tráfico motorizado no autorizado, abarca las calles interiores del centro como Larga, Lancería, Plaza del Arenal, Tornería, Pozuelo y José Luis Díez, entre otras. Entrar sin autorización supondrá una sanción de hasta 200 euros, salvo urgencias demostrables.
Por su parte, la zona 2 se activará solo si la Junta de Andalucía detecta altos niveles de contaminación del aire. En ese caso, y conforme a un protocolo establecido, se limitará el paso de vehículos y se priorizará el tráfico peatonal con medidas como plataformas únicas o reducción drástica de la velocidad.
El control de acceso a la zona 1 se realizará mediante cuatro puntos con lectores de matrículas, situados en Tornería, Pozuelo, José Luis Díez y Plaza del Progreso. Solo podrán acceder vehículos autorizados, residentes o repartidores en horario permitido —previo registro—, con especial atención a la monitorización de los niveles de contaminación.




