La Consejería de Salud estudiará informes médicos del Gregorio Marañón, hospital de referencia del joven, y del Children's Hospital, con el objetivo de verificar la alta probabilidad de éxito que le auguran en Estados Unidos.
Los padres de Marcos Carribero, 15 años y 46 operaciones a sus espaldas, han decidido no volver a intervenir a su hijo en España. En este medio denunciaron el trauma que esto supone no solo para el joven, sino para ellos mismos, que no quieren verlo “sufrir más” porque “Marcos no es un conejillo de indias”, critica Juan, su padre. Sin embargo, ahora, desde el Servicio Andaluz de Salud (SAS) abren la puerta a que pueda ser derivado al Children’s Hospital de Boston, centro donde ya fue intervenido y donde los profesionales médicos le garantizan a Marcos un éxito del 95 por ciento y cinco años alejado de los quirófanos.
Y es que, la falta de medios económicos ha impedido a sus padres llevar a cabo ese objetivo por su cuenta. Si bien hace seis años se consiguió gracias a donaciones, la solidaridad se ha ido resintiendo y los poco más de 30.000 euros que la familia tiene reservada para su hijo es del todo insuficiente. Por eso Juan lleva tantos años solicitando al SAS que deriven a su hijo a Estados Unidos, tal y como pasó hace unos años con una joven aragonesa, Aitana, también con una cardiopatía severa y a la que el Gobierno de Aragón pagó los 45.000 euros de su operación, precisamente en el mismo centro hospitalario de Boston.
Hace unos meses, Juan llevó el caso de su hijo al Congreso, donde fue atendido por el diputado de EAJ/PNV, Joseba Agirretxea, quien se comprometió a estudiar las posibilidades que existen de que la sanidad española pueda hacer frente al problema de Marcos. Sin embargo esa respuesta no fue suficiente para Juan, que ha seguido intentando que desde la propia Junta se conozca la historia de su hijo. Así, el pasado viernes, Carribero aprovechó una visita de la presidenta Susana Díaz a La Línea para trasladarse a la localidad campogibraltareña e intentar reunirse con ella, algo que finalmente consiguió. “No conocía el tema de Marcos, pero nada más contárselo me concertó una cita con Manuel Herrera —delegado territorial de Salud en Cádiz— y Julio Egido” —gerente del área de gestión sanitaria Norte de Cádiz—.
Dicho y hecho, Carribero mantuvo este pasado martes una reunión con ambos, comprometiéndose estos a estudiar concienzudamente los informes de Marcos del Hospital Gregorio Marañón —su centro de referencia— y los del Children’s Hospital, por lo que en caso de que se verifique la alta probabilidad de éxito de la operación en Estados Unidos, se activaría el protocolo encaminado a derivarlo a Boston. “Sabemos que el protocolo pasa ahora a la Consejería, o sea, que pasan la pelota a otro, pero esto es una llama de esperanza que no teníamos hace unos meses”, reconoce Juan Carribero.
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