Dicen que hay números bonitos o feos. Los sorteos, en realidad, como es sabido, no entienden de belleza. Solo es pura probabilidad. Si el sorteo es 'perfecto' en su concepción, si no hay elementos que generen distorsiones, todos los números tienen las mismas probabilidades de ser los ganadores.
Es decir, si una semana cae un premio con una combinación, existe la misma probabilidad de que vuelva a caer esa misma combinación que cualquier otro número que tengas en el bolsillo. Solo que en ese caso hablamos de una improbabilidad casi absoluta, porque sería mucha coincidencia. Pero, en la teoría, y en la práctica, está más que demostrado que un número no es más probable o improbable por el simple hecho de ya haber salido. La clave: siempre es improbable que te toque el que tú quieres, haya salido antes o no.
Pero más allá de esas reflexiones, hay que entender que para mucha gente, al tener por delante un número considerado 'feo', se quitan las ganas de invertir un dinero con la idea de que caiga. ¿Por qué? Porque podemos identificar un número sin patrones, 'rebujado' o completamente azaroso como más identificable con cualquier número premiado antes.
Un ejemplo es el '00.000'. ¿Puede salir? Sí. ¿Ha salido? En algún concurso, sorteo o demás, por probabilidad, sí. Si es a cinco cifras, debería salir aproximadamente una de cada 100.000 veces.
Un número agraciado en Jerez con un patrón 'feo'
Este sábado, en Jerez, ha caído un número muy feo. De esos que la mayoría de gente lo ve y decide no comprarlo. Un número con un patrón reconocible. Y, sin embargo, alguien lo llevaba.
El premio ha sido en la administración de lotería El Paraíso, para la Lotería Nacional del sábado. Su lotero, José Vicente López, explica que han sido 12.000 euros al segundo premio. "Vamos calentando motores" desde primeros de julio, dice, para la Navidad, ya El Paraíso es uno de los habituales entre los premiados cada diciembre y enero, incluyendo El Niño.
El número agraciado es el 63.636. Números que además de venir combinados entre sí por un patrón, son muy relacionados: el seis es el doble del tres, y además para muchos el seis es un número de la suerte, quizás por aquello del dominó.