La última jirafa nacida en el Zoobotánico de Jerez recibirá el nombre de Oripandó, según se ha anunciado tras la selección realizada entre las numerosas propuestas recibidas durante el verano. El nombre, que significa “Sol” en caló, fue sugerido por Debla Roldán Fernández, de nueve años, y resultó elegido entre todas las opciones depositadas en la urna habilitada para la ocasión.
El Zoobotánico de Jerez ha agradecido la participación de todos los ciudadanos que contribuyeron con sus propuestas, destacando la creatividad de los participantes y la implicación de la comunidad en la elección del nombre de la nueva jirafa. La iniciativa forma parte de las actividades del centro para fomentar la interacción y el conocimiento del público con los animales y la cultura local.
Durante este verano, los visitantes han podido proponer nombres para la cría de jirafa nacida en diciembre, que pertenece al programa de recuperación de la especie amenazada, las jirafas de Rothschild. Se trataba de un macho, y todas las sugerencias se han recogido para elegir la más adecuada.
Las propuestas se han podido depositar en la urna ubicada en la tienda del Zoobotánico durante las visitas. El objetivo del zoológico ha sido involucrar al público en la elección del nombre de la jirafa y concienciar sobre la conservación de esta especie en peligro.
Castilla, una jirafa veterana
La jirafa ‘Castilla’ del Centro para la Conservación de la Biodiversidad Zoobotánico de Jerez dio a luz a una cría el pasado 12 de diciembre. El nacimiento se produjo de manera natural y sin complicaciones tras quince meses de gestación, y la cría se encuentra en buen estado, compartiendo espacio con su madre y su hermano ‘Sherry’, nacido en junio de 2022. El público puede observar a ambos ejemplares en las instalaciones del centro.
La cría es hija póstuma del macho ‘Jerez’, fallecido a principios de 2024, que hasta su muerte fue padre de nueve ejemplares. ‘Castilla’ llegó al zoológico jerezano en 2013 procedente del Zoo de Gaia, en Holanda, mientras que ‘Jerez’ provenía del Safari Beekse Bergen, también en Holanda. Desde su llegada, ambos formaron pareja y contribuyeron a la reproducción del centro.