José María Velázquez-Gaztelu: "De la noche a la mañana' es un canto coral de la voz de los flamencos"

La Cátedra de Flamencología de Jerez y Estudios Folklóricos Andaluces acoge en su segunda jornada del ciclo ‘Noches de San Juan’ la presentación del último trabajo literario del periodista, escritor y poeta Velázquez-Gaztelu donde recoge medio siglo de trayectoria profesional en el mundo de lo más y menos jondo

José María Velázquez-Gaztelu momentos antes de iniciar la presentación de su libro 'De la noche a la mañana. Medio siglo en la voz de los flamencos'

Con la fina ironía que le caracteriza, el periodista, escritor y poeta José María Velázquez-Gaztelu (Arcos de la Frontera, Cádiz, 1942) daba continuidad en la noche del pasado jueves al ciclo Noches de San Juan que está organizando la Cátedra de Flamencología de Jerez y Estudios Folclóricos Andaluces, durante este mes de junio, en el Salón Mudéjar del Hotel Casa Palacio María Luisa.

La presentación de su último trabajo literario, titulado De la noche a la mañana. Medio siglo en la voz de los flamencos (Athenaica Ediciones, 2021), era la temática principal de una sesión en el que el público pudo conocer en profundidad el importante serial de entrevistas realizadas por Velázquez-Gaztelu a un sinfín de artistas flamencos que recogen sus páginas y que en su día fueron publicadas en los diversos medios en los que ha participado.

José María Velázquez-Gaztelu y Paco Sánchez Múgica durante un momento de la presentación del libro 'De la noche a la mañana. Medio siglo en la voz de los flamencos'.   MANU GARCÍA

"Este libro es un viaje emocionante y emocionado por la dimensión abierta de la memoria"

Este serial de encuentros, que abarca una franja temporal que va de 1972 a 2019 y en cuya nómina se incluyen también algunos artículos, cuatro poemas y diversos reportajes fue definido por nuestro director de lavozdelsur.es Paco Sánchez Múgica - maestro de ceremonias de la cita- como “una crónica que tiene bastantes tintes autobiográficos”, agradeciendo al mismo tiempo al autor que decidiera recoger en este libro “un recorrido de más de 50 años de profesión que encierra un caudal ingente de divulgación, de información, de datos y, en definitiva, de referencias sobre el hecho flamenco y sobre los creadores del flamenco”.

No obstante, Múgica también resaltaba “el amor a la cultura en general y, en particular, al flamenco” de un escritor, poeta y periodista en cuyo trabajo siempre están presentes “referencias históricas, antropológicas y sociológicas que van mucho más allá de lo meramente jondo y lo flamenco”. Así las cosas, apostillaba que este trabajo literario aglutina “un material de gran valía que debemos aprovechar para seguir creciendo y aprendiendo del trabajo que José María ha llevado a cabo durante medio siglo” y donde se inmortaliza tanto la memoria de los grandes nombres del legado de lo jondo como “esas otras figuras más ensombrecidas por la historia”.

La segunda jornada del ciclo 'Noches de San Juan' de la Cátedra de Flamencología de Jerez acogía la presentación del último libro de José María Velázquez-Gaztelu.   MANU GARCÍA

De una Torre Babel sin diccionario oficial a un canto coral y armónico de las voces del flamenco

Para José María Velázquez-Gaztelu, este compendio de entrevistas, reportajes y poemas es mas “una serie subjetiva” en la que intenta exponer, según su criterio, una “muestra" que considera significativa acerca del cante, el baile y la guitarra que “una antología con afán enciclopédico o un inventario exhaustivo” de sus trabajos relacionados con el flamenco.

Son cientos de personajes los que pasan por las páginas de este libro y muchas son las historias que en él se cuentan a través de “un viaje emocionante y emocionado por la dimensión abierta de la memoria” que no ha sido precisamente un sendero fácil de recorrer. “A la hora de manifestarse, un artista flamenco es lúcido y de preciso raciocinio, pero en aisladas ocasiones tuve que buscar fórmulas adecuadas para traducir y hacer legibles, por ejemplo, insinuaciones, frases con varios estratos interpretativos, incluso miradas, reiteraciones, recuerdos intemporales, monólogos titubeantes, silencios, risas, divagaciones en la sombra” argumentaba.

Este libro es un entramado dinámico de preguntas y respuestas en el que viajamos por paisajes a veces sorpresivos

Por ello, considera que De la noche a la mañana. Medio siglo en la voz de los flamencos es un espacio en el que intervienen una multitud de voces distintas de distintas épocas, que manifiestan múltiples actitudes musicales y estéticas y que “yo sólo he intentado ponerlas de acuerdo, afinarlas y configurarlas para que, a pesar de las diferencias, el resultado sea un canto coral y armónico a la hora de sonar todas juntas”. “Porque lo que une a esas voces, al fin y al cabo, es la esencialidad del arte; una sola voluntad emanando de la energía que otorga el hecho creativo” apuntaba.

José María Velázquez-Gaztelu considera que este libro es un "canto coral de la voz de los flamencos".   MANU GARCÍA

“Así que esta Torre de Babel sin diccionario oficial había que desentrañarla a través de un manual de pesquisas en el que inventar reglas de entendimiento” incidía Velázquez-Gaztelu, exponiendo que el propósito de principal a la hora de poder realizar este libro ha sido “ofrecer un texto limpio que correspondiera puntualmente a lo que deseaba transmitir el entrevistado, sin fotos, sin forzarlo ni tensarlo, para no romper la esencia de sus palabras” con el fin de llevar adelante este procedimiento.

Una tarea ardua y compleja cuya conclusión irremediable para que tuviera éxito le llevó a realizar “un ejercicio de trasmutación” y convertirse en el confidente más cercano del personaje “sin prejuicio alguno y sólo con la ayuda de la comprensión, la solidaridad, la estima y el compromiso con su obra” ya bien fuera un concierto, un disco, un espectáculo, un libro o un proyecto en el que el artista se había volcado “su más apasionado empeño”. “Introducirme en el personaje, llegar a lo más hondo de su ser, a esas zonas interiores ocultas y desconocida y procurar descubrir, con una consideración inmensa, desde luego, y con sutileza, como si se tratara de algo muy frágil a punto de quebrarse” señalaba.

Así que, con puertas abiertas de una y otra parte, cara a cara y sorteando “ese invisible telón de hielo para que el intercambio fluyera”, tras un largo proceso de aprendizaje fundamentado en el conocimiento para descifrar talantes y profundizar en la comunicación, trasladar ese testimonio a negro sobre blanco requirió de la puesta en marcha de “un sistema de traslaciones, concordancias y afinidades, tendiendo puentes para facilitar la reciprocidad”.

El flamenco: una vieja tradición en continuo proceso evolutivo

Para José María Velázquez-Gaztelu, el flamenco es “una vieja tradición en continuo proceso evolutivo” y, teniendo en cuenta esa premisa, lo más y menos jondo ahora se expone “en varios niveles donde encuentran cabida numerosas y diferentes formas expresivas”. Para él, ese es "uno de los signos que lo enriquece" y, parafraseando a Duke Ellington (Washington, 1899 – Nueva York, 1974), citaba que el flamenco es “un árbol frondoso que se contamina en todo lo que tocan sus ramas, pero en el que siempre es posible seguir el camino de vuelta a las raíces”. Ante esta circunstancia, rememoraba “las fiestas, las reuniones íntimas y, en muchos casos, familiares y de carácter doméstico” que han constituido un pilar de inmenso valor para el aprendizaje del flamenco.

Y este libro “redactado a lo largo de algo más de 50 años” recoge en parte ese sentir porque para él es “una especie de pequeña crónica o, más bien, relato personal, del devenir del flamenco en ese tiempo” teniendo como fondo el testimonio revelador de alguna de las figuras que considera “más representativas” aunque indicaba que "no están todas las que son", por supuesto, así como las conversaciones que pudo mantener con ellos en “encuentros esclarecedores y constructivos, sobre un arte de proyección internacional, que ha ocupado buena parte de mi actividad de escritor, en este caso en calidad de poeta, articulista y entrevistador, así como de guionista radiofónico y televisivo”.

José María Velázquez-Gaztelu atendiendo a lavozdelsur.es momentos antes de la presentación.   MANU GARCIA

La Niña de los Peines y la entrevista nunca llegó a terminar a Pastora

El punto de partida de esta aportación de José María Velázquez-Gaztelu a su currículo como escritor se sitúa en los mismos inicios de su trayectoria profesional. “Todo comienza cuando un joven de 15 años ya estaba publicando una serie de poemas y hacía sus primeras tentativas como escritor, dando a conocer sus textos inaugurales en el diario ABC” informaba al público, añadiendo que por aquella época “frecuentaba el Bar Pinto del cantaor Pepe Pinto – marido de Pastora Pavón ‘La Niña de los Peines’- ubicado en La Campana en Sevilla”. Y debido a esa circunstancia – además de su atrevimiento e inexperiencia como confesaba- decidió que su bautizo periodístico como entrevistador sería “una charla, nada más y nada menos que, con Pastora Pavón La Niña de los Peines’.

Puesto manos a la obra y después de conseguir el plácet de Pepe Pinto, al que definió como “un hombre afable, caballeroso y solícito con todo el que llegaba a su famoso establecimiento por donde pasaba la crema y nata del panorama flamenco nacional”. Hasta “en tres ocasiones” narraba que intentó llegar a buen puerto en estos encuentros con la cantaora, pero “había un momento en el que su parlamento se tornaba absolutamente incomprensible” y llegó a la conclusión de que Pastora ya se encontraba en regiones no reconocibles cuando la memoria sólo está habilitada por tinieblas difusas”. “He hecho una cantidad considerable de entrevistas, pero la de La Niña de los Peines, que nunca llegó a realizarse, es la que recuerdo con más emoción” confesaba.

José María Velázquez-Gaztelu considera que el flamenco es una vieja tradición en continuo proceso evolutivo.   MANU GARCÍA

La entrevista como género literario

Una de las características importantes que podrán observar quienes se acerquen a este trabajo literario es el tratamiento del a entrevista como algo más que un género periodístico. Si bien no se pierde el norte de los preceptos que la circunscriben en los manuales clásicos, José María Velázquez-Gaztelu sugería varias apreciaciones. Por un lado, mantener el “máximo respeto y fidelidad” a lo transferido por el interlocutor y, por otro lado, acudir a los recursos adecuados, tanto sintácticos como estructurales para facilitar la comprensión, siempre que fuera necesario.

Así pues, con la premisa de “no alterar para nada el cariz de la originalidad primigenia” así como procurar en la redacción “un resultado diáfano”, hacía suyas las palabras del poeta griego Constantito Cavafis (Alejandría, 1863 – 1933) señalando que “he intentado unir el lenguaje hablado y el lenguaje escrito y, para conseguirlo, he recurrido a toda mi experiencia y a toda la intuición de que soy capaz en cada palabra”.

Por ello, quienes se acerquen a De la noche a la mañana, medio siglo en la voz de los flamencos tendrá frente a si “un entramado dinámico de preguntas y respuestas, de diálogo, con el flamenco como argumento de fondo, pero en el que viajamos por paisajes a veces sorpresivos, que van surgiendo de manera natural y fluida, con el tiempo y la memoria en calidad de elementos esenciales para este viaje”.

Archivado en: