El Ayuntamiento de Jerez ha comenzado los trabajos de muestreo y tratamiento biológico de mosquitos en el aliviadero de la Laguna de Torrox, con el objetivo de eliminar tanto los malos olores como la proliferación de insectos que venían afectando a los vecinos de la zona. Esta actuación se enmarca dentro del compromiso adquirido por el gobierno local con los residentes.
Las tareas están siendo ejecutadas por la empresa concesionaria Lokímica, especializada en control de plagas, y consisten en una primera fase de muestreo de larvas, seguida de la aplicación de un tratamiento biológico específico para erradicar los mosquitos en este enclave natural.
Una vez finalizada esta intervención, el Ayuntamiento tiene previsto poner en marcha labores de limpieza general en toda la zona de la Laguna. El teniente de alcaldesa de Servicios Públicos, Jaime Espinar, ha destacado que “estos trabajos ya se habían comunicado a los vecinos y ahora se están cumpliendo en tiempo y forma”.
Un verano con más riesgos por las lluvias
Espinar ha explicado que “en Jerez contamos con un Plan municipal de vigilancia y control de vectores, cuyo objetivo es minimizar los posibles efectos perjudiciales en la población”. En este sentido, ha recalcado que desde el Gobierno local se presta especial atención a la prevención durante el verano, cuando el riesgo de plagas se dispara.
El responsable municipal ha insistido en que “este año, al ser muy lluvioso, es más probable la proliferación de insectos, por lo que hay que extremar las precauciones”. Asimismo, ha recordado que hace meses ya se acordó con Lokímica la intensificación de las labores preventivas, con foco en zonas sensibles como la Laguna de Torrox y el entorno rural.
El plan municipal contempla no solo acciones correctoras sino también medidas preventivas, integradas en una estrategia de lucha coordinada. Entre ellas, se incluyen inspecciones de posibles focos de cría, análisis del comportamiento de las poblaciones de mosquitos y aplicación controlada de biocidas.
Un sistema integral de control de vectores
El protocolo incluye también el uso de trampas para adultos con el fin de realizar un seguimiento preciso de la dinámica poblacional. Este método permite ajustar la intensidad de los tratamientos y anticiparse a nuevas oleadas de insectos que puedan generar problemas de salud o molestias a la ciudadanía.
Desde el Consistorio insisten en que esta estrategia se implementa de forma escalonada y planificada para asegurar su efectividad a largo plazo. El compromiso del Ayuntamiento es actuar de forma proactiva ante cualquier foco que pueda representar un riesgo para la salud pública o la calidad de vida.
Con estas actuaciones, Jerez refuerza su política de prevención ambiental y demuestra su intención de atender con rapidez las demandas vecinales, especialmente en épocas como el verano, en las que las condiciones meteorológicas favorecen la expansión de plagas.
