La Asociación de la Prensa de Jerez (APJ) celebró en las Bodegas Fundador la entrega del XIII Premio Nacional de Periodismo Juan Andrés García, en un acto que reafirmó el compromiso del gremio con los principios de honestidad, rigor y servicio público. En un contexto marcado por el avance de las noticias falsas y la polarización social, la ceremonia fue también una defensa encendida del oficio y de quienes lo ejercen con vocación y responsabilidad.
El galardón principal fue concedido a los periodistas Joaquín Gil y José María Irujo por el reportaje La vida secreta del asesino de Arturo Ruiz, publicado en El País, una investigación que el jurado ha descrito como “una labor no sólo periodística, sino también investigadora para encontrar al asesino de Arturo Ruiz". La estatuilla fue entregada por Encarna Vázquez, viuda de Juan Andrés García, y el presidente de la APJ, Javier Benítez.
Premios que conectan el periodismo nacional y local
Durante el acto también se entregó un accésit a la periodista Sonia Arnáiz por su trabajo El Torno. 80 años de vida en la Vega del Guadalete, emitido en Onda Jerez, en reconocimiento a su capacidad para capturar la memoria colectiva de una comunidad a través de un retrato narrativo cargado de sensibilidad. La entrega fue realizada por la vicepresidenta de la APJ, Rocío Fontán, y la directora de Relaciones Institucionales de El Corte Inglés, Isabel Mora.
El evento contó con la asistencia de autoridades locales y provinciales, entre ellas la alcaldesa de Jerez, María José García-Pelayo, el rector de la Universidad de Cádiz, Casimiro Mantell, y el diputado provincial y teniente de alcaldesa del Ayuntamiento de Jerez, Agustín Muñoz, así como representantes del mundo académico, familiar y periodístico. La presidenta de la Asociación de la Prensa de Cádiz, Mabel Caballero, también estuvo presente en una ceremonia que reunió a numerosos profesionales de la comunicación de la comarca.
Periodismo de raza que busca la noticia
Durante su intervención, Javier Benítez subrayó que “los trabajos premiados son el mejor homenaje que Juan Andrés puede tener”. Reivindicó “un periodismo de raza, que busca la noticia y a sus protagonistas con dotes policiales, en el caso de Irujo y Gil, o hace retratos de épocas pasadas que siguen marcando el presente, como es el caso de Sonia Arnáiz”. Añadió que le hacía “especial ilusión que se reconozca al mismo tiempo el trabajo de un diario nacional y de una televisión municipal”.
El jurado destacó especialmente el “esfuerzo por hacer un periodismo certero” y el despliegue de recursos necesarios para llevar a cabo una investigación profunda, “algo muy meritorio en unos tiempos en los que cada vez hay menos recursos para tratar las historias como se merecen”. El fallo reconoce no solo la calidad de los contenidos premiados, sino su capacidad para elevar el estándar del periodismo contemporáneo en contextos diversos y con diferentes medios a su alcance.
