“Somos una familia que lo único que queremos es ganarnos la vida, aquí estamos diez personas trabajando y esto nos está hundiendo la Feria”. Francisco Rodríguez es el encargado de la caseta de la hermandad del Consuelo, del Pelirón, que no entiende el maltrato que han sufrido en la red social Facebook. El pasado sábado de alumbrado, un cliente, descontento con los supuestos precios abusivos de la caseta, publicaba cosas como que la misma no contaba con lista de precios visible, o que un refresco costaba cuatro euros. Enseguida su mensaje se hacía viral y se compartía una, dos, tres… y así hasta casi 5.000 veces en 72 horas.
“Nos han dicho de todo, hasta que si somos ladrones y que nos vayamos a nuestra tierra. Anoche pillamos a otro haciendo fotos de la portada… Es estar en la puerta y escuchar a algunos diciendo que no entran porque somos los de Facebook. Estamos disgustados porque lo que se está diciendo no es verdad”, señala el casetero, que explica que vienen de Albacete, si bien aquí trabajan personas no solo de la localidad manchega, sino de otros puntos de Andalucía e incluso de Jerez.
Lo cierto es que visitando la caseta o mirando la carta uno descubre que no es cierto todo lo que se ha dicho en redes. Los menús están pegados a las paredes y se entregan a todos aquellos que lo solicitan. Los refrescos no valen cuatro euros, sino dos, y un montadito vale seis euros, sí, pero no es el clásico montadito que se come en Jerez, pequeño, sino uno de estilo sevillano, con pan de viena, dos filetes, dos pimientos y acompañado de abundantes patatas fritas. Los precios, de primeras, pueden resultar más caros que en otras casetas, pero todo tiene su explicación: “Aquí los platos los servimos para cuatro personas, en fuentes grandes. Y tenemos degustaciones a diario, vamos sacando ofertas reduciendo los precios de la carta… Algunos de hecho nos han dicho que se han encontrado todo lo contrario de lo que han visto en Facebook y que lo iban a comentar”.
Desde la hermandad del Consuelo no han querido entrar en polémicas. Su hermano mayor, Juan Luis Vázquez, lamenta lo ocurrido, porque también daña la imagen de su cofradía y no entiende que se hayan “cebado” con ellos “cuando aquí lo que hay son unas personas que lo único que quieren es ganarse la vida”.
A última hora de la tarde de este pasado martes, el autor del mensaje en Facebook se personaba en la caseta para lamentar lo ocurrido y comentar que no esperaba que su mensaje llegara a tener tanta transcendencia, señalan desde la hermandad. La publicación ya se ha borrado de la red social y ahora tanto cofradía como trabajadores solo esperan que la caseta remonte y que esto quede como una simple anécdota.
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