El pasado diciembre gobierno, Horeca y negocios llegaron a la conclusión de que era la mejor opción para que los bares pudieran montar terrazas, cerrar antes y mitigar así las molestias vecinales.
Van para cuatro meses de la reunión que mantuvo el gobierno municipal con la patronal Horeca y los propietarios de los bares de plaza Vargas para sentar las bases de una solución que contentara a vecinos y hosteleros. En dicho encuentro, celebrado a finales del pasado diciembre, se llegaba a la conclusión de peatonalizar la recoleta plaza para que los negocios pudieran instalar allí terrazas y ofrecer un servicio más dirigido a la tapa que a la copa larga. Para ello tendrían que adaptar su licencia a bar, con lo cual podrían abrir y cerrar antes. En definitiva, convertir Vargas en un espacio más enfocado al disfrute diurno que nocturno, ya que el horario de apertura permitido sería hasta las 2 de la madrugada.
La idea gustó a todas las partes por igual, ya que de hecho los negocios llevan años reclamando una peatonalización de la plaza, mientras que por parte de Horeca se entendía también que esto podía poner punto y final al debate que en los últimos años ha generado Vargas entre vecinos y bares a cuenta del ruido y la suciedad. De esta manera, el teniente de alcaldesa de Urbanismo, Paco Camas, emplazaba a las partes a una reunión futura con vistas a seguir avanzando en el tema y estudiar los presupuestos correspondientes. Sin embargo, ya llegada la primavera y con el buen tiempo a la vuelta de la esquina, desde el Ayuntamiento se ha producido un parón en este tema que ha dejado atado de pies y manos a Horeca.
“El estudio ya está hecho, pero no se ha presentado al Ayuntamiento porque no nos ha llamado. Ahí también hay que saber qué peatonalización va a hacer. En tanto en cuanto no nos comunique qué se va a peatonalizar no se pueden definir una serie de temas, porque todo depende de los espacios y el sitio que quede libre”, explica Antonio de María Ceballos, presidente de Horeca, que explica que por su parte el técnico se ha encargado de tomar medidas y estudiar la incidencia y la reverberación del sonido en los bares, pero reitera que “sin conocerse el tema de la peatonalización no podemos hacer más”.
Aunque no tiene noticias, De María quiere entender que Urbanismo ya ha encargado este estudio. “Si no fuera así ya sería serio, pero me quedo con lo que dijo Camas, que se iba a hacer el estudio”. Lo cierto es que fuentes municipales señalan a lavozdelsur.es que de momento este tema está “en stand by”, por lo que parece que llegará el verano y la peatonalización todavía no se habrá producido.
Mientras tanto, los vecinos del entorno siguen dispuestos a denunciar al Ayuntamiento, tal y como anunció la asociación vecinal del centro histórico a finales del pasado año tras decidirse por mayoría en asamblea. Sin embargo, y al igual que Horeca, también están a la espera de Urbanismo, según señala Alejandro González, presidente de la asociación. “Seguimos esperando a que nos remitan la documentación que solicitamos, expedientes sancionadores y licencias de los negocios, porque hasta que no veamos eso no sabemos a quién va a ir dirigida la denuncia. Lo que parece claro es que ellos van a demorar esto todo lo que puedan”.
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