Las sedes del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) y de la Tesorería General de la Seguridad Social, actualmente en las céntricas calles Eguilaz y Ancha, pasarán a concentrarse a partir del año que viene en un moderno edificio en La Asunción. El proyecto, cuyo presupuesto asciende a unos 10,5 millones de euros, se licitó hace unos cinco años —se anunció hace más de una década, noviembre de 2010— y tenía un plazo de ejecución de 28 meses, pero, en cambio, una serie de contratiempos han provocado que no vaya a ser hasta 2022 cuando pueda entrar en funcionamiento, según ha avanzado el Gobierno central.
Como se avanzó en su momento, el edificio (en realidad son dos edificios interconectados) constará de tres plantas, un sótano y tres en superficie, donde se ubicarán 52 empleados de la Tesorería General y otros 36 correspondientes al centro de atención e información de la Seguridad Social (Caiss). La superficie construida sobre rasante —junto al lavadero de coches frente a la nueva Comisaría, en una parcela de equipamiento público cedida por el Ayuntamiento entre las avenidas de Arcos y Rafael Verdú— ya es totalmente visible y cuenta con 3.255 metros cuadrados, mientras que el sótano ocupa 1.610 metros cuadrados.
Esta zona de la ciudad, en la avenida de Arcos, pasará en unos años a concentrar muchos servicios públicos que hasta no hace mucho estaban en el centro de la ciudad, como la Comisaría de la Policía Nacional, que ya se mudó hace un año desde el Arroyo. El salto en calidad y comodidad en la atención al público será importante, pero por otro lado preocupa el vaciado de contenido a nivel de servicios en organismos públicos que acumula el corazón de la ciudad.
A pregunta parlamentaria de la diputada jerezana María José García-Pelayo, el Gobierno respondió hace unos meses que estas obras del nuevo centro de la Seguridad Social en Jerez se paralizaron al haber aparecido enterrada en la parcela donde se estaban ejecutando las obras una canalización compuesta de doce tubos de fibra óptica y de cobre perteneciente a Telefónica.
En agosto pasado, la respuesta oficial abundaba: "La dirección facultativa de las obras expuso que el trazado de estos tubos coincidía con el del muro sur del sótano del edificio y, por este motivo, se solicitó la paralización temporal total de las obras hasta que estuviera subsanada esta incidencia y el trazado eliminado". El 29 de enero de 2020, Telefónica informó a la Dirección Provincial de Cádiz que los trabajos de desvío habían quedado finalizados y solo estaba pendiente el traslado de un cable de Orange. La comunicación de la finalización de este último trabajo fue el pasado 7 de mayo de 2020, lo que supuso la desaparición de los motivos para continuar la suspensión.
"Mediante Resolución de la Dirección General del INSS de 22 de mayo de 2020, se acordó el levantamiento de la suspensión temporal total del contrato de las obras de ejecución, siendo la correspondiente acta de levantamiento de suspensión emitido con fecha 1 de junio de 2020. Respecto a la finalización de las obras indicadas, se tiene previsto que finalicen las mismas en el año 2022".
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