Desde Jerezanos en Acción han denunciado la situación de las bibliotecas municipales, con solo dos de estas instalaciones, la Biblioteca Central y La Granja, que han permanecido abiertas en verano en horario de nueve de la mañana a dos de la tarde. El resto de equipamientos de la red municipal de bibliotecas, Coloma, La Plata y San Telmo, así como todas las bibliotecas rurales, Guadalcacín, La Barca, Nueva Jarilla, Estella del Marqués y Torrecera, permanecen clausuradas.
Sin embargo, durante esta misma semana, denuncian, se ha sumado el cierre de la biblioteca de la Granja, por lo que solo permanece abierta la Biblioteca Central durante cinco horas por la mañana.
Desde esta organización política, aseguran que han hecho averiguaciones para conocer el grado de ocupación de las bibliotecas, siendo imposible conocer estadística oficial. "Hemos asistido varios días seguidos para comprobar in situ la asistencia de las bibliotecas. Concretamente, en La Granja a las nueve y cuarto ya estaba su aforo completo.
"Se da la circunstancia de que en esta época del año es donde hay más asistencia de público en las bibliotecas, pues los jóvenes están preparando exámenes de septiembre, recuperación de Selectividad, oposiciones, etcétera, sin embargo es cuando menos plazas se ofertan por el Ayuntamiento", han lamentado.
"Jerez es una ciudad con casi 215.000 habitantes en las que su Ayuntamiento hace poco ha anunciado su deseo de aspirar a la Capitalidad Europea de la Cultura 2031. Con nueve de las diez bibliotecas municipales cerradas, consideramos que la aspiración a dicha capitalidad por parte del gobierno municipal del PSOE es un tanto extravagante", han dicho. A lo que han añadido. "Una ciudad que impide el acceso a la cultura por la vía de sus bibliotecas, que asfalta su casco histórico, o que permite que se caigan a pedazos sus edificios históricos, parece que poco tiene que aportar a la cultura. Ojalá esa aspiración fuera real, pero no con discursos vacíos y falta de proyectos serios, sino con realidades".
Por todo ello, han exigido al ejecutivo socialista la apertura de más bibliotecas y la "habilitación inmediata de espacios adecuados para que nuestros jóvenes puedan tener acceso adecuado a la cultura".
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