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La subida de los precios de la vivienda en Jerez, tanto a la hora de vender como de alquilar, unida a la turistificación han dado lugar a una crisis habitacional en la ciudad.
Aunque la alcaldesa María José García-Pelayo ha manifestado en varias ocasiones que Jerez no tiene problema con las viviendas turísticas, el colectivo Jerez por una vivienda digna ha asegurado que más de 1.300 familias han perdido su hogar por culpa de la turistificación.
Dicho colectivo ha realizado varias movilizaciones en los últimos tiempos bajo el lema de Jerez para vivir. Por el derecho a la vivienda.
Los precios para comprar son prohibitivos, con hipotecas a 40 años y con unas cantidades desorbitadas. ¿Ha tenido siempre Jerez problemas con las viviendas? ¿Cómo era la situación hace varias décadas?
En Gala. Revista de Sociedad, Bellas Artes y Turismo que se publicaba en Madrid aparecía en la primavera de 1969 un anuncio de la inmobiliaria San Estanislao, fundada en tierras jerezanas, que ofertaba la segunda fase del núcleo residencial Nazaret. Una iniciativa urbanística que se encontraba entre las más llamativas de la llamada época del desarrollismo en Jerez.
Unas viviendas que, como refería el anuncio, "usted puede adquirir en las siguientes condiciones: sin entrada" y con los tres primeros años pagando de 4.500 a 5.000 pesetas mensuales. Los diez años siguientes el pago era de 2.000 a 2.500 pesetas.
Las viviendas, de 83 metros cuadrados, tenían tres dormitorios, una sala de estar-comedor, un baño, una cocina, lavadero y una gran terraza. El anuncio también hace referencia a que la venta se acuerdo se hace en base a la Ley 68.
