La Hermandad de la Borriquita aprobó en cabildo Extraordinario el proyecto de nuevos faldones para el paso de misterio de Cristo Rey. La exposición corrió a cargo del bordador Jesús Rosado, quien será también el encargado de ejecutar las nuevas piezas.
El objetivo principal de este proyecto es adecuar los faldones actuales a las nuevas dimensiones del paso, que estrenará una nueva mesa en la Semana Santa de 2026, adaptada a las modificaciones estructurales que se están llevando a cabo.
Renovación fiel al diseño original
Las obras de restauración y adecuación del conjunto están siendo realizadas por el taller Artesanía Religiosa & Dorado-Restauración de Daniel Sánchez Vázquez, de Huelva. Este taller se encuentra actualmente trabajando en la nueva mesa, además de en la restauración y mejora de la canastilla y respiraderos, siempre respetando el diseño original de la obra.
Dentro de este proceso de renovación, la hermandad ha decidido no limitarse a trasladar los bordados anteriores, sino también enriquecer los faldones con un nuevo diseño que se aplicará de forma idéntica en los laterales y la trasera del paso.
Los nuevos faldones, para la Semana Santa de 2027
Según los plazos establecidos, los nuevos faldones podrán contemplarse en su totalidad en la Semana Santa de 2027, completando así una de las fases más destacadas del proceso de mejora del paso de misterio.
Asimismo, durante el mismo cabildo extraordinario se presentó y aprobó el nuevo estandarte corporativo de la hermandad, que también será realizado por Jesús Rosado y cuyo diseño fue mostrado durante la sesión.
El nuevo guión está previsto que se finalice para la festividad de la Inmaculada de 2026, sumándose al patrimonio artístico y devocional de la corporación del Domingo de Ramos.
Antes del cabildo extraordinario, la hermandad celebró su cabildo ordinario de apertura del curso 2025-2026 en el que se aprobaron distintas iniciativas para el nuevo curso cofrade.
Entre ellas destaca la celebración del besapiés a Cristo Rey en Cuaresma, al igual que en años anteriores, manteniendo además la veneración en su festividad de noviembre, y la organización del besamanos a Nuestra Señora de la Estrella también durante la Cuaresma.


