El Ayuntamiento de Jerez ha dado un paso decisivo para recuperar las instalaciones donde antaño funcionó el Spa Club. La junta de gobierno local ha aprobado la propuesta de adjudicación a la empresa Clínica Mediland S.L., que será la encargada de ocupar y explotar este espacio de titularidad municipal, cerrado y abandonado desde hace casi una década. El objetivo del Consistorio es reactivar el edificio y devolverle su uso sanitario a través de esta concesión pública.
Además, se ha acordado requerir a la compañía la entrega de la documentación reglamentaria previa a la adjudicación definitiva de la concesión administrativa. Con este trámite, se avanza hacia la reapertura de un complejo que durante años ha permanecido sin actividad y cuyo deterioro ha sido evidente.
Según ha señalado el Ayuntamiento en una nota, el edificio, situado en la avenida Puertas del Sur, lleva cerrado más de diez años. En este tiempo ha sufrido las consecuencias de la falta de mantenimiento y de diversos actos vandálicos, lo que ha provocado daños visibles en puertas, revestimientos, escaleras, cristales, zonas exteriores y también en instalaciones de fontanería y servicios eléctricos.
Para evitar que este patrimonio municipal siguiera en desuso, el Gobierno local aprobó en septiembre de 2023 la extinción de la anterior concesión administrativa. Con esa decisión se abrió la puerta a una nueva licitación que, finalmente, permitirá recuperar el espacio y ampliar la oferta de servicios sanitarios disponibles en la ciudad.
El futuro del antiguo Spa Club de Jerez
El contrato tendrá una duración de 25 años, contados desde la formalización de la concesión administrativa. La cantidad mínima de licitación se fijó en 1.279.824,35 euros. El inmueble cuenta con dos plantas de altura y se asienta sobre una parcela de 4.890 metros cuadrados, lo que lo convierte en un espacio con gran potencial para el desarrollo de actividades vinculadas al cuidado de la salud.
La empresa adjudicataria no solo explotará las instalaciones, sino que también deberá hacerse cargo de su rehabilitación integral. Esto implica ejecutar todas las obras de reparación, restauración, mantenimiento, reforma y mejora técnica que sean necesarias para garantizar su correcto funcionamiento.
