Agentes de la Policía Local han rescatado dos perros que se encontraban en malas condiciones higiénico-sanitarias en la barriada de Picadueñas. Esta intervención se enmarca en los servicios de vigilancia de posibles episodios de maltrato o abandono animal que se pudieran dar en Jerez.
Rubén Pérez, delegado de Seguridad y de Protección y Bienestar Animal, ha señalado que "el compromiso del Ayuntamiento cuando la vida de un animal corre peligro es innegable y así hemos actuado de manera urgente en varias ocasiones. Estos dos perros veían peligrar su vida si no se hubiera actuado de inmediato, se han realizado más de 20 visitas para comprobar su estado. Hoy se ha resuelto; el Grupo Beta de la Policía Local y técnicos de Medio Ambiente han actuado y convencido al propietario, que ha colaborado para que nos hayamos podido llevar a los dos ejemplares al Centro Municipal de Protección y Animal".
El rescate de los dos canes se ha podido realizar gracias al aviso de protectoras de la localidad y a la colaboración ciudadana que alertaban por distintos medios de la situación de dos perros que se encontraban en una terraza de pequeñas dimensiones rodeados de excrementos, basuras, en condiciones de insalubridad y sin los cuidados mínimos necesarios.
Estos hechos denunciados motivaron la intervención coordinada del Grupo Beta de la Policía Local, la Delegación de Medio Ambiente, así como el Seprona de la Guardia Civil.
Se procedió a la tramitación de diligencias judiciales y denuncias administrativas por tales hechos y mientras duraba este procedimiento se efectuó un continuo seguimiento del estado de los animales, efectuándose visitas periódicas al domicilio, dado que el dueño de los animales se negaba a la entrega voluntaria de los animales.
En una de las continuas visitas para el seguimiento de los animales por parte del Grupo Beta de la Policía Local y vigilantes de la Delegación de Medio Ambiente, se ha podido comprobar como los animales a pesar de las altas temperaturas provocadas por la ola de calor existente en esos momentos, continuaban entre enseres y basuras acumuladas, sin un lugar adecuado para guarecerse de las inclemencias ambientales. Además de no tener la alimentación adecuada, se ha podido verificar sobre el terreno que el lugar es un foco de insalubridad, observándose la presencia de ratas.
Ante la evidencia de la falta de atención higiénico-sanitaria, existiendo riesgo de que estos animales pudieran sufrir maltrato animal y tras explicarle las consecuencias que le podría acarrear el estado en el que tiene los perros, se le solicita al inquilino del inmueble una vez más la entrega voluntaria de los mismos a lo que accede. Los dos perros, uno de raza galgo marrón atigrado y otro mixto parecido a un pastor catalán de color negro, fueron trasladados al Centro Municipal de Protección y Animal.
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