La iglesia de San Mateo está otra vez en obras. Se trata del inicio de la tercera fase de restauración del templo, en el que, desde hace un par de días, se pueden ver los andamios instalados en la fachada, signo de que los trabajos se han iniciado. Como adelantó a lavozdelsur.es el hermano mayor de la Hermandad del Desconsuelo, el objetivo es reabrir el salón de la sacristía y otras dependencias, pero sobre todo rehabilitar la espadaña, “para volver a oír las campanas cuando salga el Desconsuelo”. La intervención arranca por iniciativa de la propia parroquia y el obispado junto con la asistencia de la cofradía, que desde el cierre del templo por ruina asumió su reapertura, hecho que tuvo lugar en 2002.
En este contexto, el obispado realizó una actuación de emergencia hace cuatro años rehabilitando la escalera de acceso a la plata superior, mientras que la hermandad resolvió la restauración de la capilla sacramental en 2014, donde, tras el retablo rocalla levantado en honor de María Santísima del Desconsuelo en el siglo XVIII, se financió e inauguró en 2018 un columbario que ya alcanza una ocupación del 50 % y cuyos fondos por su uso se destinan íntegramente al sostenimiento de San Mateo.
La hermandad señala que, de partida, se cuenta con una “generosa” aportación de Bodegas Fundador, propiedad del empresario filipino Andrew Tan, que colabora con la hermandad y con otras instituciones del barrio en diferentes iniciativas. “Pero no es suficiente y cualquier ayuda es bienvenida para asegurarnos la continuación de más actuaciones en el templo. La parroquia ha habilitado un número de Bizum (05156) y una cuenta corriente a nombre de San Mateo (ES77 0049 7323 2821 1000 9836), donde pueden enviarse donativos de cualquier importe”, informa la cofradía en un comunicado.
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