El proyecto, financiado con fondos de la Edusi, comienza esta semana y provoca cambios en el tráfico rodado.
Las obras de peatonalización de la plaza de Las Angustias comienzan esta semana, por lo que habrá cambios en el tráfico rodado de la zona y, además, se eliminarán las plazas de aparcamiento regulado por ORA en la calle Trinidad, donde se habilitará un aparcamiento para motocicletas y plazas de aparcamiento para Personas con Movilidad Reducida (PMR). Con estas primeras actuaciones comienza a materializarse el proyecto de semipeatonalización de la emblemática plaza jerezana, que se llevará a cabo gracias a la financiación de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible Integrado (Edusi), correspondiente al Fondo Europeo de Desarrollo Regional Feder, con un presupuesto que ronda los 300.000 euros.
La actuación está prevista sobre una superficie de 3.500 metros cuadrados, de los que 1.500 se corresponden propiamente con la peatonalización de viales rodados. Del mismo modo, esta actuación en Las Angustias conlleva la renovación viaria en la parte sur, es decir, en la zona que va desde el final de la calle Pedro Alonso, el paso de entrada a calle Molineros y enlace con calle Porvenir. En esta parte habría dos sentidos de circulación y no se descarta la ubicación de parque infantil y parte biosaludable en la nueva zona peatonal frente a la entrada al edificio del centro de mayores.
El proyecto contempla la peatonalización completa de dos de las calles perimetrales a la plaza, en concreto, de la L conformada por un tramo de la calle Diego Fernández Herrera, de unos 70 metros de longitud, y el pasaje entre calles Levante y Corredera, de 50 metros, y con una anchura de entre 15 y 20 metros. Para ello, se prevé la eliminación de la calzada, transformándola en plataforma única y utilizando una solería similar a la existente en la calle Corredera”, ha explicado el técnico del equipo redactor del proyecto, Fernando Bueno. 
En consecuencia, las calles que confluyen con ese tramo de Diego Fernández Herrera, como son Santísima Trinidad e Higueras, pasarán a ser semipeatonales y, por tanto, tendrán limitado el acceso rodado a residentes y carga y descarga de comercios cercanos. El tramo de que va desde las calles Corredera a Porvenir y el comprendido entre Diego Fernández Herrera y Corredera, el proyecto prevé la retirada del pavimento de adoquín y la colocación de uno nuevo de aglomerado que reducirá el ruido que provoca por la rodadura actual.
Asimismo, tras la ejecución de estas obras, el tramo de Corredera pasará a tener doble sentido de circulación para facilitar el tránsito de vehículos procedentes de Diego Fernández Herrera; además, la parada de autobuses de Corredera se trasladará al inicio de la calle Porvenir, y la de Diego Fernández Herrera pasará a formar parte de la existente frente a la fachada de la iglesia. Además, y de forma paralela, se procederá a la renovación de las redes de abastecimiento y saneamiento de los tramos que se van a peatonaliza.
El proyecto se completará con la plantación de árboles y la colocación de mobiliario urbano de características similares a los existentes en la plaza y acordes al carácter histórico, ya que, como recoge el documento con las especificaciones de mismo, pretende “favorecer la transición a una economía baja en carbono en todos los sectores”, “el fomento de la movilidad urbana sostenible”, de estrategias de reducción del carbono para todo tipo de territorio, especialmente las zonas urbanas, incluido el fomento de la movilidad urbana multimodal sostenible y las medidas de adaptación con efecto de mitigación”.
El gobierno local considera que “con esta iniciativa, Jerez prosigue con el modelo de ciudad abierta, accesible y moderna de otras ciudades europeas”. La alcaldesa Mamen Sánchez subraya el compromiso de “revitalizar el centro histórico, para que sea más accesible y para que los ciudadanos puedan disfrutarlo, y que a la vez, sea beneficioso para la actividad económica y comercial”, un proyecto para la Edusi que nace de IU, por lo que su portavoz Raúl Ruiz-Berdejo asegura que “contribuirá a equilibrar el centro, a un mejor aprovechamiento de los espacios públicos y a recuperar el tránsito peatonal en la zona”.
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