Federico Mayo es uno de los barrios del Distrito Sur de Jerez. Conocido como El Chicle, porque hasta no hace tantas décadas sus calles no estaban urbanizadas y con la lluvia se transformaban en pegajoso fango, tiene una pasado y un presente común al de muchas otras barriadas y zonas de la Jerez comida por las altas tasas de paro y marginalidad, pero también por un vecindario repleto de buenas personas, obreros, trabajadores y trabajadoras, pensionistas, que solo quieren prosperar en paz y en armonía con su comunidad.
Generalmente, los conflictos son los que a menudo dan titulares en prensa, pero el día a día es de cotidiana normalidad. Por supuesto, también en el colegio público del barrio, el Federico Mayo.
Precisamente la comunidad educativa de este centro ha salido este viernes a la calle, acompañados por representantes del Centro Comunitario Intercultural Marco Marchioni, para realizar una marcha por el barrio para recordar a algunos lo obvio: que el colegio es de todos y todas. Es decir, como apuntaban vecinos, que "si roban aires acondicionados del centro (como ha sucedido), están robando a sus niños y niñas".
Con el objetivo de una mejora de la convivencia en el barrio, y tras una serie de actos vandálicos, han recordado la importancia de cuidar una de las piedras angulares para el futuro de El Chicle, su colegio. Con una marcha de unas 220 personas, entre alumnos de 3 años hasta 6º de Primaria, docentes, familias y otros representantes de la comunidad socioeducativa de Jerez, han llegado hasta la plaza de San Rafael y han acabado decorando las vallas perimetrales del centro con los carteles hechos para la acción de concienciación.
"No se trataba de protestar contra nadie, sino que queríamos reivindicar que el mejor futuro del barrio pasa por cuidar y respetar su cole, ese es el mensaje, no era una manifestación contra la seguridad o el Ayuntamiento, sino para sensibilizar a quienes tienen aquí a sus nietos e hijos, que es su segunda casa", cuentan a lavozdelsur.es los convocantes de la marcha.
El manifiesto que han leído dice lo siguiente: "Hoy viernes 24 de mayo, estamos aquí reunidos, familias, profesores y alumnado para reivindicar un cole bonito respetado, donde todas las personas cuidemos los espacios compartidos. Para ello es fundamental y necesario tirar los vidrios, váper y otras cosas a la papelera y no a los patios de nuestro cole. Recoger las cacas de las mascotas y no dejarlas en el suelo de nuestro cole. No nos gusta ver pintadas en las fachadas de nuestro centro. Cuidar los parques infantiles y columpios para que los niños y niñas puedan seguir disfrutándolos. Educar en el respeto y cuidado de lo que tenemos, para que cuando lleguen días duros de calor y podamos estar bien en las clases".
"Nuestro cole debe ser el corazón de nuestro barrio, corazón que debe latir con mucha fuerza para que nuestro alumnado y nuestras familias lo sientan como algo suyo, y como un espacio a cuidar entre todos y todas. Nuestro alumnado se pregunta muchas veces por qué se encuentran tantas cosas en el patio, cosas que no deben tocar y que, en definitiva, son peligrosas para ellos. Entre todos y todas debemos adquirir esa conciencia de no utilizar nuestro patio como una papelera, y esto debe calar hondo en nuestro barrio y sus gentes, ya que en este cole están nuestros hijos, nuestros hermanos, nuestros sobrinos, nuestros vecinos. Queremos trabajar desde el respeto que toda la comunidad le debemos al espacio donde habitan muchas horas nuestros pequeños y pequeñas, y por tanto, debemos proteger nuestro cole como lo que es, como la segunda casa de todos y todas".
"Cuando nos roban o nos vandalizan, tenemos que ser conscientes de que, a los que más daño se les hace son, como hemos dicho, a los que más tiempo pasan en nuestro centro a nuestro niños y niñas. Esta marcha que hoy realizamos es para tomar conciencia y esforzarnos entre todos y todas por mejorar la convivencia en nuestro en barrio, aprendiendo a respetarnos desde todas las diferencias y diversidades, y cuidando lo nuestro. Quizás sea el mejor ejemplo que podemos transmitir a nuestros hijos e hijas. En nuestras manos está hacer grande y bonito nuestro barrio. Y ¡¡¡entre todos y todas lo conseguiremos!!!".