Caza al vendedor ambulante

La Policía Local decomisa más de 2.300 kilos de alimentos procedentes de puestos ambulantes no autorizados durante los últimos cuatro meses de 2013. ¿Es desmesurado por parte del Ayuntamiento multar con un mínimo de 3.000 euros a quien recurre a vender en la calle para subsistir?

La Policía Local desmontó en los cuatro últimos meses de 2013 hasta 56 puestos de venta ambulante de alimentos no autorizados, incautando un total de 2.398 kilos de frutas, verduras y huevos; 65 kilos de pescado y marisco y 8 kilos de bollería. Las actuaciones han tenido lugar por todo Jerez, y también en pedanías y barriadas rurales. La mayoría, en los alrededores del mercadillo de los lunes (Hijuela de las Coles) y el de los sábados (La Granja), en la zona de Merca 80 San Benito y en los alrededores del Mercado Central de Abastos, aunque aquí se permite la venta de productos de temporada como tagarninas y espárragos.

Los productos decomisados se ponen a disposición de las autoridades sanitarias. "Los que se consideren aptos para el consumo, una vez finalizada la inspección sanitaria, se pueden devolver al titular si éste demuestra con facturas el origen y la propiedad de los mismos. En caso contrario, se envían a organizaciones benéficas de la ciudad", afirma el Ayuntamiento en una nota de prensa remitida a los medios. Así, los productos en mal estado se donan a los bancos de alimentos.

La venta ambulante sin licencia se considera "muy grave" según las a las ordenanzas municipales, por lo que la multa puede ir desde 3.000 euros hasta 18.000, hasta se puede considerar delito si los productos ponen en riesgo la salud de los clientes. ¿Una pena desmesurada para quien recurre a vender en la calle para intentar ganarse la vida?