Asalto y rescate de película a una familia a la que intentaron robar en su casa armados con navajas, cuchillos y pistola

Un agente de la Policía Nacional y otro de la Guardia Civil, encontrándose ambos fuera de servicio y ayudados por varios vecinos de un bloque lograron impedir el asalto que cuatro individuos estaban llevando a cabo en una vivienda de Jerez, donde instantes antes habían accedido con gran violencia armados con navajas, cuchillos y un arma de fuego simulada cuando los moradores de la casa se encontraban en su interior, un matrimonio con dos hijas que estaban siendo agredidos para que les entregaran el dinero y los objetos de valor de los que dispusieran.

Los hechos ocurrieron el pasado martes de Feria, sobre las ocho de la mañana cuando un agente de la Policía Nacional destinado en la Comisaría de Jerez que se dirigía a su puesto de trabajo observó a un grupo de cuatro varones que entraban en el portal de un edificio de viviendas cercano y que le levantaron desconfianza sobre sus intenciones. Inmediatamente se situó en el portal del inmueble mientras contactaba con la Comisaría de Jerez y la sala del 091 relatando sus sospechas y solicitando que enviaran al lugar agentes uniformados.

Apenas unos segundos después el agente comenzó a oír gritos de auxilio que parecían provenir de varias niñas desde el interior de uno de los pisos de la tercera planta. En ese mismo instante caminaba por la zona un agente de la Guardia Civil destinado en el puesto principal de la Palma del Condado (Huelva) que también pudo escuchar los gritos de auxilio de las jóvenes. Ambos agentes se adentraron en el edificio de viviendas subiendo por las escaleras comunitarias hasta el descansillo del tercer piso, donde se les unieron varios vecinos del bloque que de forma desinteresada se ofrecieron a ayudar a ambos agentes.

En esos instantes, del interior de la vivienda salió corriendo una niña gritando y pidiendo auxilio, repitiendo que iban a matar a su familia, por lo que ante los indicios claros de poder estar produciéndose una situación de extrema gravedad con vidas en peligro, ambos agentes decidieron entrar en la casa tan solo armados con la defensa reglamentaria que el policía portaba en su coche, mientras se identificaban claramente y repetidamente como agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil.

El padre de familia estaba en el salón, tendido boca abajo e inmovilizado por un asaltante con un cuchillo de grandes dimensiones. Su hija adolescente estaba en la misma situación en el pasillo de la casa

En un primer momento uno de los asaltantes sujetó la puerta desde el interior para impedirles la entrada, pero finalmente pudieron hacerse paso, encontrando en el salón de la casa al padre de familia tendido boca abajo inmovilizado por uno de los asaltantes, que portaba en sus manos un cuchillo de grandes dimensiones y a la hija adolescente del matrimonio tendida boca a abajo en el pasillo de la casa mientras otro individuo estaba sentado encima de ella manteniendo una arma blanca tipo navaja en su cuello.

Los agentes ordenaron a los asaltantes que depusieran su actitud, dirigiéndose el policía nacional a auxiliar a la joven en el pasillo mientras el guardia civil hacía frente al individuo en el salón. Ambos ofrecieron una fuerte resistencia a su detención tratando de agredirlos. Un tercer y un cuarto individuo aparecieron desde una de las habitaciones golpeando a uno de ellos en la cara con un puñetazo y un fuerte mordisco en una de sus manos al policía mientras estaba reduciendo al varón que mantenía la navaja en el cuello de la joven. Sin embargo, ambos agentes, con ayuda de varios de los vecinos del edificio, lograron imponerse a los cuatro individuos que conformaban el grupo de asaltantes, logrando arrebatarles el cuchillo, la navaja y lo que parecía ser un arma de fuego que luego se demostró que era simulada, para luego reducirlos hasta la llegada minutos mas tarde de un nutrido grupo de agentes de la Policía Nacional.

Un quinto asaltante, detenido una semana después tras huir

Un quinto individuo del grupo criminal que se encontraba en las inmediaciones con un vehículo todo terreno esperando a los asaltantes para emprender la huida, logró abandonar el lugar antes de que pudiera ser arrestado. Sin embargo, la investigación que se inició de forma inmediata a los hechos ha podido llevar a cabo su total identificación y ha posibilitado su detención en la mañana del lunes 14 de mayo. Los detenidos se tratan de cinco varones, todos vecinos de Jerez, de 44, 40, 23, 21, y 20 años. A los tres de mayor edad les figuran respectivamente 29, 21 y tres antecedentes previos por la comisión de distintos delitos en distintas localidades de la provincia de Cádiz.

Los cuatro primeros detenidos fueron trasladados junto con las armas intervenidas hasta las dependencias de la Comisaría de Jerez, donde ingresaron en calabozos hasta que fueron puestos a disposición de la autoridad judicial, quien decretó el inmediato ingreso en prisión de todos ellos. El quinto detenido pasó a disposición judicial en la mañana del lunes 14, quedando en libertad con cargos.

La investigación ha sido desarrollada por la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta UDEV de la Brigada de Policía Judicial de la Comisaría de Jerez, los agentes que intervinieron en primer lugar pertenecen al Grupo de Investigación de Delincuencia Urbana de la Comisaría de Jerez y a la Unidad de Seguridad Ciudadana del Puesto Principal de la Guardia Civil en la localidad de La Palma del Condado (Huelva).

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