Un dramático suceso en el barrio de Fairfield Park, en Bath (Reino Unido), ha dejado en estado crítico a Marisa Maestre, una mujer de 36 años natural de Lepe (Huelva), que fue brutalmente atacada por dos perros de raza peligrosa mientras intentaba proteger a su hijo de 3 años.
El ataque se produjo el pasado 23 de septiembre, en torno a las 18.30 horas, cuando los animales, identificados como cane corso o mastín italiano, se abalanzaron sobre el menor. La madre, que lleva varios años residiendo en Reino Unido por motivos laborales, no dudó en lanzarse al suelo para cubrir al pequeño con su cuerpo. En ese momento, los perros la atacaron de forma violenta, causándole gravísimas heridas en la cabeza.
196 puntos de sutura en la cabeza
La víctima fue evacuada en helicóptero en estado crítico y trasladada de urgencia a un hospital cercano, donde tuvo que ser intervenida de inmediato para reconstruirle gran parte de la zona afectada, incluidos los pabellones auriculares. Según relató a la agencia EFE, los médicos le aplicaron 196 puntos de sutura en la cabeza tras una compleja operación.
Después de permanecer una semana en la UCI, Maestre se encuentra ahora en planta, recuperándose lentamente de las secuelas del ataque. Por su parte, el niño sufrió heridas menos graves, aunque también tuvo que recibir atención médica.
El dueño de los perros, arrestado
La Policía de Bath actuó de inmediato y detuvo al propietario de los animales, un hombre de 50 años, bajo la sospecha de ser responsable de “perros peligrosos fuera de control”. Los ejemplares, según confirmaron las autoridades, eran Cane Corso, una raza catalogada como potencialmente peligrosa.
Como parte de la investigación, los agentes han solicitado la colaboración ciudadana para esclarecer los hechos. De hecho, han llegado a preguntar casa por casa en la zona para recopilar testimonios de vecinos que pudieran haber presenciado el brutal ataque.
El suceso ha causado una gran conmoción tanto en Bath como en Lepe, la localidad natal de la víctima, donde familiares y conocidos siguen con preocupación la evolución de su estado de salud.