El portero Rayan Al Torok, de catorce años, denuncia que ha sido expulsado de las categorías inferiores del Granada CF por presunto racismo debido a su origen palestino. "Desde el primer día en que conocieron mi origen comenzaron los problemas", cuenta, ya que insiste en que fue a raíz de conocerse su nacionalidad palestina.
"Tras cinco años completamente normales, mi hijo comenzó a tener desencuentros con su entrenador cuando subió al Infantil A. Apenas lo hacía participar en los ejercicios grupales, así como tampoco en los partidos, donde jugaba los últimos minutos, el mínimo que exige la normativa", cuenta la madre en el periódico Ideal.
El portero criticó en redes sociales a su entrenador por darle "un trato diferente a los demás" después de mostrar su apoyo a la causa palestina. La familia se pensó interponer denuncia, pero finalmente no llegó a presentarla.
La parlamentaria andaluza Alejandra Durán, de Podemos —formación que en el Parlamento está dentro de Por Andalucía— asegura que han elevado el asunto al Defensor del Pueblo Andaluz.
"Hago un llamamiento a la afición granadinista para que el canterano Rayan expulsado de forma injusta al parecer por sus orígenes palestinos vuelva al club de sus amores", dice Durán.
Sin indicios de racismo
El club elevó el asunto al Órgano de Cumplimiento Normativo, un mecanismo externo de comprobación para que abriera una investigación al respecto, tras lo que no se encontraron indicios de xenofobia, aludiendo a criterios meramente deportivos en la reducida presencia del portero en el equipo.
El Granada CF niega que se haya tratado de un caso de racismo, y alega causas deportivas, ya que fue al subir de categoría cuando el entrenador empezó a contar menos con Rayan.
