Paz Padilla, humorista, actriz, presentadora y empresaria gaditana afincada en Madrid, presenta su nuevo libro Alzar el duelo, con el que pretende acompañar a quienes atraviesan la pérdida de un ser querido. La artista declara a 20 Minutos que escribirlo le ha permitido ordenar sus pensamientos y compartir herramientas para afrontar el dolor y la vida tras la muerte de alguien cercano.
La publicación coincide con su participación en la comedia Cuerpos locos, en la que una adulta y una niña intercambian perspectivas para reconectar con la vida y entenderse mutuamente. Sobre la película, Padilla afirma: "Hay mucho humor. Cuando ves el mundo desde otra perspectiva te das cuenta de que ni los buenos son tan buenos ni los malos lo son tanto".
"En el extranjero aprovecho para hacer tonterías y disfrutar"
Mantener contacto con su niña interior es fundamental para su bienestar: "¡Necesito volver a ser niña cada día! Cuando estoy en el extranjero aprovecho para poder hacer tonterías por la calle y disfrutar de ese anonimato". Según explica, esta filosofía ayuda a recuperar la ilusión y la creatividad que muchos adultos pierden con el tiempo.
Padilla también reflexiona sobre la honestidad emocional y la claridad frente a la mentira. "Prefiero gestionar una verdad a vivir en una mentira", asegura. Sobre su forma de pensar y lo que opinan los demás, añade: "Alguna vez han pensado que estoy colgada, pero yo creo que la neurociencia está avanzando tanto y se están demostrando tantas cosas que afortunadamente el pensamiento general ha cambiado. Cuando alguien me dice que estoy colgada, yo respondo con información científica".
Tres cuerpos: el físico, el mental y el espiritual
Su interés por la espiritualidad y la neurociencia forma parte de su vida diaria: "He descubierto que somos tres cuerpos: el físico, el mental y el espiritual. Cuando uno de los tres no va bien, todo se desmorona". Tras la muerte de su hermano, participó en un retiro de diez días que le permitió vivir experiencias especiales de conexión y reflexión sobre la pérdida.
La actriz subraya la importancia de aceptar lo que no se puede cambiar: "Luchar contra lo que no puedo cambiar ni evitar solo me hace daño a mí. He aprendido a poner el amor y la compasión por delante". También aclara rumores sobre su situación económica: mantiene un colchón cómodo que le da tranquilidad, pero sigue vinculada a su trabajo y a la gestión de su empresa NoNiNa, donde su socia Ana se ocupa del día a día.
Para Padilla, la felicidad reside en lo cotidiano y en vivir con autenticidad: "Soy terrestre y vivo con miedos, pero cuando pierdes el miedo a la muerte le pierdes el miedo a todo". Con su libro, su película y sus reflexiones, comparte una visión de la vida que combina humor, introspección y aceptación, integrando ciencia y experiencia personal.