Cádiz se prepara para vivir uno de los eventos cofrades más destacados del año. María Santísima de los Dolores será una de las protagonistas del 'Besamanos Magno', una cita extraordinaria que reunirá a las principales imágenes marianas de la ciudad entre los días 12 y 15 de agosto de 2025, en el marco del Año Jubilar de la Esperanza y la conmemoración del 75º aniversario del dogma de la Asunción.
Esta propuesta, impulsada por el Consejo de Hermandades y Cofradías de Cádiz con el respaldo del Obispado de Cádiz, pretende ofrecer un recorrido espiritual a través de las imágenes de las distintas cofradías. Cada una de ellas estará expuesta en su sede canónica en besamano, “siguiendo un formato sobrio y sin acompañamiento musical, como expresión de recogimiento y oración”.
Solemnidad en Santa María
En este contexto, María Santísima de los Dolores será venerada en la capilla de Nuestro Padre Jesús Nazareno, dentro de la iglesia de Santa María, desde el miércoles 13 hasta el viernes 15 de agosto. La imagen permanecerá expuesta de forma ininterrumpida, permitiendo a los fieles acercarse y participar en este acto de devoción.
La participación de la titular mariana de la corporación del Regidor Perpetuo se inscribe dentro de un programa aprobado por la autoridad eclesiástica, que contempla otras actividades litúrgicas y devocionales asociadas al Año Jubilar y a la celebración de la Asunción de la Virgen.
Rosario público y vigilia en Santo Domingo
Entre los actos paralelos destacan una vigilia en la víspera de la Asunción, prevista para el 14 de agosto en la iglesia de Santo Domingo, y un rosario público el día 16, cuya ruta aún está pendiente de confirmación.
El 'Besamanos Magno' se configura así como una oportunidad única para reencontrarse con la tradición mariana de la ciudad. En paralelo, la ciudad también se prepara para otra cita sin precedentes: la Peregrinación Extraordinaria de Nuestro Padre Jesús Nazareno, que se celebrará del 29 de agosto al 6 de septiembre. Esta procesión histórica llevará por primera vez al titular a barrios de extramuros y parroquias de Cádiz, convirtiéndose en uno de los momentos más esperados del calendario jubilar.
