Niña Pastori brilló con luz propia en la primera de sus dos actuaciones previstas en Cádiz, una ciudad que considera especialmente significativa en su trayectoria. La cita, celebrada en un Gran Teatro Falla con todas las entradas agotadas —igual que ocurrirá en su segunda cita con la Tacita de Plata, que tendrá lugar esta noche a las 20 horas—, reunió a seguidores que esperaban una velada cargada de emoción, música y raíces. La cantante, natural de San Fernando, se presentó ante su público con un espectáculo centrado en su universo navideño.
Un espectáculo que une tradición y flamenco
La artista llegaba a Cádiz tras haber triunfado un día antes en Huelva con su gira navideña, un recorrido que pone en escena su disco Feliz Navidad y que combina algunos de sus temas más emblemáticos. El público se puso en pie cuando la cantante dio vida a un montaje cuidado al detalle, construido para celebrar la Navidad desde la sensibilidad flamenca que caracteriza su trabajo.
En el repertorio no faltó su célebre “entre zambombas, palillos y panderos”, un guiño directo a las tradiciones festivas andaluzas que recibió una ovación prolongada. La artista incorporó también villancicos populares, reinterpretados con su sello personal y esa mezcla de emoción y ritmo que la ha convertido en una de las voces más reconocidas del género.
La intérprete mantuvo un tono cercano durante toda la actuación, hilando cada pieza con alusiones a la importancia de compartir música en fechas señaladas. Esta gira, concebida para recorrer distintos rincones de Andalucía y del resto de España durante las fiestas, llevará a Niña Pastori a ciudades como Granada, Sevilla, Murcia, Mérida, Málaga, Jaén, Córdoba o Barcelona. Su propuesta busca acercar al público una Navidad anclada en la tradición, pero actualizada con un estilo que ya es referencia dentro del flamenco contemporáneo.