Ganó el Sevilla FC, que ya es noticia teniendo en cuenta la irregular y sufrida campaña que está firmando el conjunto hispalense. Los de Caparrós, que ha estrenado su casillero de victorias en su cuarta etapa como técnico sevillista, derrotaron a la UD Las Palmas por la mínima gracias a un tanto del joven delantero Pascual. Un gol que bien puede valer una permanencia, pero que no ha servido para calmar las aguas a su paso por Nervión.

El triunfo frente al conjunto canario, al que solo un milagro le salvará de no bajar a Segunda División, no ha rebajado la tensión que ya se vivió el pasado sábado a las puertas de la ciudad deportiva José Ramón Cisneros, cuando un centenar de radicales derribaron una puerta y trataron de acceder al interior de las instalaciones.
La afición se vuelve hacia el palco para pedir la marcha de Junior
Nada más concluir el encuentro frente al cuadro insular, la afición se volvía hacia el palco del Sánchez Pizjuán para pedir la dimisión de Junior, apodo con el que se refieren a José María del Nido hijo.
Ya fuera del estadio, los ánimos han seguido caldeados con gritos y cánticos contra los actuales dirigentes, con Del Nido Carrasco a la cabeza. Unos directivos a los que la Policía Nacional recomendaba a principios de semana no dejarse ver en actos públicos para evitar males mayores.
"Directiva, dimisión", ha sido el grito enfurecido que han entonado aficionados del conjunto sevillista, concentrados en la puerta 1890, que están cansados del devenir deportivo, social y económico del Sevilla FC.
Para evitar que la situación fuera a más y se descontrolara, un dispositivo policial se ha montado en las inmediaciones del Pizjuán para reforzar la seguridad.






