La Eurocopa que se está disputando en Alemania está dejando momentos para el recuerdo. Unos futbolísticos, y otros que trascienden lo deportivo. El partido que enfrentó a la anfitriona a Dinamarca en octavos de final (2-0) es uno de los más particulares hasta el momento.
Pasada la media hora de partido, el Alemania-Dinamarca estuvo a punto de suspenderse por una tormenta eléctrica. En el minuto 34, el árbitro Michael Oliver paró el encuentro para indicarle a los jugadores que enfilaran el túnel de vestuarios. Finalmente, se reanudó el partido, que tuvo de todo.
Los alemanes lograron clasificarse para cuartos de final, donde serán el rival del ganador del partido España-Georgia, que se disputa este domingo. Los goles de Havertz y Musiala certificaron la clasificación de los anfitriones.
El partido también estuvo marcado por la polémica intervención del VAR, que anuló un gol por un fuera de juego milimétrico a los daneses. Un tanto que hubiera dado un giro al partido, que terminó del lado de los alemanes.
Pero también tuvo otro episodio llamativo el encuentro entre Alemania y Dinamarca, ya que durante toda la segunda parte, el partido se jugó mientras un encapuchado estaba encaramado al techo del estadio, después de trepar por las vigas.
De hecho, el partido se reanudó más tarde de lo previsto tras el descanso, por la presencia de esta encapuchado. Aunque se jugó y al finalizar el encuentro, la policía lo neutralizó a punta de pistola, como relata el diario Bild.
Las autoridades mantuvieron vigilado a este hombre durante los 45 minutos de juego que quedaban por disputarse, y no fue hasta el pitido final cuando lo arrestaron. De momento, se conoce que el hombre tiene 21 años, pero no se sabe cuales eran sus intenciones, ni qué portaba en la mochila negra que llevaba en la espalda.
