María Pérez vuelve a hacer historia en el atletismo mundial. La atleta granadina se ha proclamado campeona del mundo en los 20 kilómetros marcha, logrando así su segundo oro en estos Mundiales y el cuarto de toda su carrera deportiva. Una gesta que confirma su condición de reina indiscutible de la disciplina y la coloca como gran referente del equipo español en Tokio.
Con control absoluto y una determinación que dejó boquiabiertas a sus rivales, Pérez cruzó la meta sabiendo que acababa de firmar una de las páginas más brillantes de su trayectoria. Ya había saboreado la gloria en este mismo campeonato días atrás, y ahora repite triunfo para consolidar un doblete dorado que no está al alcance de cualquiera.
“Es un sueño hecho realidad. Sabía que llegaba fuerte, pero nunca imaginé poder salir de aquí con dos oros”, confesó emocionada tras la prueba. Sus palabras reflejan lo que supone este nuevo éxito, que no solo amplía su palmarés, sino que también la consagra como la gran estrella del atletismo en Tokio.
Una estrella en Tokio
La afición, tanto en las gradas como desde España, siguió con expectación cada paso de la que ya es considerada un ejemplo de constancia, sacrificio y talento. El dominio de la española se percibió desde los primeros kilómetros, en los que logró llevar un peldaño por encima del resto. Su ritmo implacable y su capacidad para mantener la concentración hasta el último metro marcaron la diferencia.
Este triunfo en los 20 km marcha se suma a los otros títulos mundiales que Pérez ha conquistado en los últimos años. Con apenas 29 años, su carrera sigue en plena ebullición y apunta a ser todavía más legendaria. El nombre de María Pérez ya brilla con luz propia en el panorama internacional, y su hazaña en Tokio ha sido aplaudida con orgullo desde España.