Virginia Montaño (Antequera, 1986 ) y Álvaro Molinillo (El Puerto de Santa María, 1986) son el alma máter de Duerme Simón, un proyecto musical de origen andaluz que se afincó en Madrid hace ahora unos seis años. Durante estos días andan en la fase promocional del crowdfunding —método de financiación colectiva— que dará lugar a su segundo disco, Supernova.
La historia de Virginia y Moli (así le gusta que le llamen) es la de tantos otros andaluces que vieron en Madrid una tierra de oportunidades, tanto a nivel laboral como musical. "Me mudé a Madrid en 2012, un día después de presentar mi TFM (Trabajo de Fin de Máster) sobre un tema de historia de la música en la Universidad de Salamanca. Ya sabía que no iba a poder vivir de aquellos estudios debido a la crisis asquerosa que azotaba y sigue azotando este país, así que tuve que probar suerte en Madrid trabajando de algo relacionado con la música o con la educación, mi otra carrera. Iba con una guitarra a las espaldas porque tenía mucho que contar. Ya había escrito algunas canciones que fui presentando en garitos con micros abiertos", recuerda Virginia. "Fue entonces cuando participé en una serie de conciertos como corista junto a un cantautor amigo por rincones de Andalucía, y dio la casualidad de que a uno de ellos, en La Estación de Sevilla, acudió Moli y nos presentaron. Luego sucedió lo que tienen las casualidades, eso que no se pueden describir con la cordura de la mano. Meses después él viajaba también a Madrid a comenzar un nuevo trabajo un poco cansado de la vida monótona que vivía en Sevilla y allí nos reencontramos".
Después de probar con varias formaciones y estilos, Moli y Virginia conformaron, junto a Josh Hannaby y Uriel Morales, el cuarteto inicial de Duerme Simón, con el que firmaron su primer disco, Bendita Valentía, que se publicó en 2016 con Txarlie Solano a la producción. En esos ocho cortes se podían escuchar sonidos intensos y complejos que acercaban a Duerme Simón a la música experimental: "La crítica nos ha calificado como 'pop atmosférico', aunque nosotros no nos vemos reflejados ni en el pop ni en el rock. Nos gusta decir que hacemos canciones para oídos curiosos".
Los integrantes de Duerme Simón, por las calles de Madrid. FOTO: PAULA MORAIS
¿Qué supuso ese primer trabajo? "Fue un hermoso aprendizaje. Un disco creado en poco tiempo. Empezamos en febrero a maquetar las canciones, en junio entramos a grabar y en septiembre ya estábamos presentándolas en directo. Queríamos todo deprisa y corriendo. La inexperiencia no fue buena consejera. Quisimos desde muy pronto ser una banda de cuatro músicos compacta y con unos ideales compartidos claros (a ilusos no nos ganaba nadie), y pecamos de querer correr antes que caminar", señala Virginia, aunque saca el lado positivo del asunto: "Por suerte las canciones son como los libros, inmortales".
Entonces llegó una pausa necesaria: "Después de Bendita Valentía hicimos un parón. Fue sanador. Decidimos quedarnos solos y sentarnos delante del piano y la guitarra a decidir cuál era realmente nuestro origen y hacia dónde queríamos ir. Ya no era productivo querer seguir siendo más de dos".
Nuevos retos, nuevos horizontes
Moli y Virginia siguieron el camino como dúo y aquello no supuso ningún drama, sino todo lo contrario: "Quedarnos solos en Duerme Simón ha sido un máster en cuanto a la búsqueda de sonido se refiere. Hemos oído muchísimos discos que nos han inspirado a raudales. Moli se ha puesto a estudiar guitarra como un loco, aprendiendo nuevas escalas, nuevas afinaciones y efectos. Yo he releído libros de referencia y he escuchado música que nos condujera por nuevos caminos melódicos. Todo esto, junto a muchas noches de vino y charlas delante del ordenador grabando ideas, han hecho que podamos ir construyendo lo que podréis escuchar en el segundo disco Supernova".
Ambos se sienten entusiasmado dar a conocer su disco más personal: "Supernova es un grito claro a la libertad. Un mensaje de lucha contra todo lo que te impide ser quien realmente eres. Hay mucha fuerza en sus letras, mucho desgarro y a veces incluso cabreo; pero también emoción y ternura. Hemos estado demasiado tiempo en silencio y las canciones al final reflejan esas ganas. Ganas locas de salir y gritar que hemos vuelto para quedarnos".
Moli a la guitarra y Virginia a los teclados. FOTO: ANTONIO MONTESINOS
Advierten sobre este nuevo disco que "está lleno de oscuridad, pero también está lleno de luz. Sus canciones te irán llevando por distintas historias donde siempre se quedará escondido un nuevo detalle para la siguiente escucha. Capas de sintetizadores, efectos y atmósferas van sucediéndose alrededor de un mensaje muy contundente. Vimos claro su nombre por la metáfora de la explosión posterior a la muerte de una estrella, una cantidad ingente de energía que se despliega sin reparo y sin poder detenerse".
Supernova contará con un total de diez canciones que han sido grabadas en OMC Estudios bajo la tutela de Omar Carrascosa. Su single, 'La Ingravidez' contará con un videoclip que será grabado por la realizadora Ana Nevado. Aunque todavía quedan cuatro canciones por grabar, la campaña de financiación ya se ha puesto en marcha no sin dificultades: "En el mismo instante de esta entrevista hemos alcanzado el 55% del total del objetivo, y aún quedan 20 días para poder llegar a su fin. Un crowdfunding es un suplicio con todas las letras. Se sufre muchísimo, no se duerme y te dan bajones en los que la autoestima se esfuma y la confianza se desvanece... pero luego, cada día que pasa, miras el mail y descubres nuevas personas que se suman a tu proyecto de vida, confiando en él sin ni siquiera oír ningún adelanto. Entonces entra un soplo de aire en el cuerpo que es indescriptible. Así que casi me atrevería a decir que es una sensación que “engancha”. Ya son 58 mecenas y esperamos que sean muchísimos más porque sinceramente, por este disco merece la pena apostar".
Duerme Simón, en el barrio de Lavapiés. FOTO: PAULA MORAIS
Virginia y Moli se casaron el pasado año tras varios años de noviazgo. Lo suyo es una historia de amor y música, indisociables ambos. Pero, ¿hay el mismo feeling en el estudio, a la hora de componer las canciones? Parece que sí: "Casi siempre soy yo la que traigo un germen con un trozo de letra y unos acordes o una canción entera de las que salen “del tirón”. Después Moli “hace magia” en el ordenador superponiendo pistas y efectos que hacen que la canción vaya pareciéndose a lo que queremos que suene. Y otras veces es Moli quien graba un riff de guitarra que tiene gancho, y tras poner un ritmo de batería que más o menos funcione, hago unos acordes con el teclado que sustenten el riff, nos colocamos los cascos, ponemos el micrófono y probamos con melodías de voz hasta que damos con una que le parece que puede encajar. Una vez que está el primer puzzle montado nos sentamos los dos frente al ordenador y empezamos a quitar y poner piezas hasta que la estructura nos convence".
Las influencias de Duerme Simón son diversas: Vetusta Morla y Rufus T. Firefly en la escena nacional o Tame Impala, Alt - J o Arctic Monkeys entre otros en el ámbito internacional. En cuanto a discos, Moli y Virginia tienen gustos dispares pero "si tenemos que mencionar uno que nos haya volado la cabeza a los dos, sin duda es el último disco de Jorge Drexler: Salvavidas de hielo. En un momento de sentirnos bastante perdidos este septiembre, oímos la canción 'Movimiento' y hubo una frase que nos hizo levantarnos de la silla y de la vida literalmente para hacer click y empezar a hacer cosas: “Si quieres que algo se muera, déjalo quieto”. Se nos ponen los pelos de punta".
La presentación de Supernova tendrá lugar el próximo 17 de octubre en la sala El perro de la parte de atrás del coche, en el corazón de Malasaña, en Madrid. Después Duerme Simón girará por Cádiz, Málaga, Granada, Sevilla, Valencia y Elche. "Queda Duerme Simón para mucho rato. El día de la presentación se cumplirán dos años sin subir a un escenario y nos morimos de ganas de poder enseñar este universo propio que nos hemos sacado de la manga y del corazón, con toda la verdad que tenemos y toda la transparencia que se puede ofrecer. Estos son nuestros sentimientos y así nos gusta contarlos".
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