Dos bolígrafos pegados en el cartel de la entrada, dos Bic sin tinta, nos resumen lo que vamos a contemplar en esta muestra: dibujos hiperrealistas de animales y vegetales realizados sólo con bolígrafo. Basta la mirada de un perro para apreciar la labor del artista. Paco Mármol ha dibujado cada pelo, cada reflejo en el ojo o cada brillo en la húmeda trufa. Los matices de cada trazo rozan la perfección. Ni los insectos se libran de la mano de este cirujano del boli, orfebre de la tinta… Las zanahorias y las calabazas carecen de orejas y ojos, pero plantean otros retos a Paco: atrapar cada textura y cada tono. Contemplamos absortos la complejidad de una coliflor, el brillo de una berenjena y las armaduras de una alcachofa y un rinoceronte. Ha tenido la paciencia del relojero y la pericia del pulidor de lentes. Al final, la realidad no es duplicada. El hiperrealista crea un mundo que desborda la mirada ingenua. Crea ante nosotros lo que ya existe para que descubramos nuestra ceguera.

En la inauguración Paco Mármol nos contó la historia de este proyecto. Hay dos años de trabajo en las paredes de la Pescadería Vieja. Los que ya conocen al artista se preguntarán qué ha ocurrido para que alguien dedicado a la abstracción geométrica se embarque en el dibujo realista. En su página www.pacomarmol.com pueden constatar este giro creativo. Las anteriores exposiciones, de hace varios años ya, exhiben estructuras circulares y colores planos, con predominio del naranja. Paco Mármol ha realizado también trabajos de diseño editorial. Si hablamos de giro es porque el autor ha pasado de estructuras frías y abstractas al enrevesado mundo natural, a la realidad. Estos giros sólo pueden darlos los artistas de verdad, los que acumulan experiencia en todas las técnicas y estilos.

Después de las exposiciones de La Línea y de Cádiz, en las que tuvo que producir mucha obra, se tomó un descanso. Fue tan largo que prácticamente dejó de pintar. Entonces comenzó a experimentar en otros terrenos, con otras técnicas. La creatividad ha de encauzarse de alguna forma, ya sea en el diseño, la pintura o la música. Por casualidad una noche vio un documental de un artista madrileño –Juan Francisco Casas– que utilizaba esta técnica del bolígrafo. Quiso saber hasta dónde podía llegar él mismo con esa técnica. Y empezó a dibujar retratos de sus hijos sólo con bolígrafo. Y como quería alcanzar la máxima perfección, buscó imágenes ricas en detalles: “Por eso me centré en animales y plantas, dibujos en los que pudiera reflejar hasta el último pelo, el brillo en la mirada, las motas de polvo, la gama de colores, cada sombra…”

Al principio no tenía la intención de exponer. Se trataba de un reto técnico. Pero las comparte en las redes sociales y comprueba que gustan. Tras esa visibilidad interactiva, el Ayuntamiento de Conil le invita a exponer con otros autores. Presenta tres dibujos que reciben gran aceptación. Cuando le piden una exposición individual mira hacia atrás y recopila todos sus dibujos, animales y plantas. A Paco Mármol le gusta que una exposición tenga un discurso, un sentido. Esta muestra cierra un ciclo, muchas horas de trabajo en solitario. “Cuando uno crea se aísla, es un paréntesis, el artista con sus materiales, lo demás desaparece… Ahora es el momento de compartirlo –nos dice. Son manchas, líneas, puntos,.. El visitante tiene que interpretarlas y disfrutarlas con su propia mirada.”

 

Horario de la sala Pescadería Vieja: de martes a viernes, de 10 a 14 horas por la mañana, y de 17 a 20 horas por la tarde. Los sábados y domingos sólo en horario de mañana, de 10 a 14 horas.

Sobre el autor:

juan carlos gonzalez

Juan Carlos González

Filósofo

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