Joaquín Sabina se despidió definitivamente de los escenarios en un último concierto celebrado en el Movistar Arena de Madrid, donde más de 12.000 personas corearon sus himnos generacionales. El cantautor, de 76 años, apareció con su característico bombín para anunciar a un público emocionado que “este es mi último concierto. El más importante, el que recordaré siempre”, una declaración que marcó la atmósfera de una noche que, sin lugar a dudas, pasará a la historia musical de este país.
Con este adiós, la música española despide a un artista de vida bohemia reconocido por un estilo inconfundible, con su voz áspera, su mirada de cronista urbano y un talento excepcional para convertir la vida cotidiana en versos memorables. Sabina, durante más de medio siglo de profesión, ha construido una obra única donde confluyen el desencanto, el humor, el amor roto y la celebración de lo imperfecto. Su carácter libre y rebelde, siempre ajeno a las modas, lo ha consolidado como una figura irrepetible.
El artista de Úbeda (Jaén) explicó que “esta gira que se llamaba ‘Hola y adiós’ ya pasó por medio mundo y esta noche sólo se llama adiós”, en referencia al recorrido internacional que culminó en la capital. También expresó su gratitud hacia quienes lo acompañaron durante décadas, al asegurar que “mis canciones han crecido y yo con ellas y han conseguido de un modo misterioso colarse en la memoria sentimental de varias generaciones. Todo esto os lo tengo que agradecer a vosotros”, unas palabras que provocaron una ovación prolongada de un público que no olvidará el 30 de noviembre de 2025.
Una despedida anunciada en la gira ‘Hola y Adiós’
El concierto comenzó con ‘Yo me bajo en Atocha’, un homenaje explícito a Madrid, la ciudad que adoptó al músico y desde donde consolidó su trayectoria. La velada formó parte del cierre de la gira Hola y Adiós, en la que Sabina había adelantado que se retiraría de los grandes escenarios. Sentado en un taburete, con su sombrero de siempre y consultando ocasionalmente una pantalla para seguir algunas letras, repasó cinco décadas de canciones y poesías que han marcado la memoria cultural de varias generaciones.
Entre el público se dejaron ver numerosos artistas, figuras públicas y políticos, que quisieron sumarse al adiós. Entre ellos, Víctor Manuel y Ana Belén, Dani Martín, Ara Malikian, Manuel Carrasco, David Trueba y Vanesa Martín. El recorrido final de Sabina arrancó el 27 de enero en México DF, y concluyó en Madrid con un concierto cargado de emotividad donde el artista no pudo contener las lágrimas. Así, el músico dijo adiós a medio siglo de escenarios en una noche que sus seguidores, y él mismo, recordarán para siempre.
