Álvaro Marabot, guitarrista de The Magic Mor, reconoce que "muchas veces sale empate entre gastos e ingresos. Vivir de esto es complicado”.
No puede decirse que Álvaro Marabot sea un músico de vocación. A sus 29 años reconoce abiertamente que “mi gran pasión eran las olas. No pude dedicarme antes porque el tema del surf me tiraba mucho. Para tocar algún instrumento me organizaba en función del tiempo que me dejaban las olas”.
La guitarra fue su primer acercamiento a la música. Marabot recuerda que “empecé a las 11 años y ya he cumplido la mayoría de edad. Al principio era muy autodidacta. La afición me vino desde pequeño porque mi padre tenía una colección de vinilos y de CD. Una vez contemplando a un extranjero que tocaba junto a su puesto en la plaza de Abastos flipé con el simple hecho de observarlo levantar una tecla”.
Este joven gaditano se sincera al señalar que “no he tenido referentes musicales. Siempre me han llamado la atención las canciones más que los intérpretes. En la actualidad alternó la guitarra, los estudios y el surf. Cuando aprendí no había internet y siempre he tocado con gente en la calle”.
"Hasta que no he tenido una cierta edad no he conseguido superar ese miedo escénico que supone verme sobre un escenario"
Igualmente señala que “hasta que no he tenido una cierta edad no he conseguido superar ese miedo escénico que para mí supone verme sobre un escenario. No me gustaba hacer directos, lo de subirme a los escenarios me daba pánico, no tenía esa disciplina”. Respecto a sus primeros contactos rememora que “hace cinco años se pusieron en contacto conmigo, en concreto fue Julio Cable porque le hacía falta un guitarra para un proyecto”.
En este punto cuando Marabot admite que “Julio Cable es el responsable de que yo sea lo que soy en la actualidad. Con él ofrecí mi primer concierto en 2014 en el Baluarte de la Candelaria Para mí supuso una experiencia nueva y tuve que hacer un esfuerzo para enfrentarme a actuar delante de un público. En mis inicios lo pasaba muy mal los días de los conciertos. No me encontraba igual que en casa”.
El guitarrista afincado en el barrio de La Viña de Cádiz forma parte de la banda 'The Magic Moor'. La define como “un proyecto que se gestó hace un año y medio cuando empezamos a quedar. A partir de ahí surgió todo en compañía de Juan y Ernesto (Ernie). Desde entonces hemos tocado en sitios tan diversos como Barcelona, Valencia, Málaga, Madrid, Badajoz, Lleida o Sevilla. Nuestro gran reto es el concierto que ofreceremos el próximo sábado día 15 en Benicassim”.
Califica la música de su grupo como “sicodélica” y advierte de que “se puede sobrevivir con este género. Ahora mismos somos cinco personas y hay que pagar alojamiento, transporte y dietas. Muchas veces sale empate entre gastos e ingresos. Vivir de esto es complicado”. Finalmente adelanta que “he grabado ocho discos pero tengo claro que debo compaginar con otras cosas para poder vivir”.
Comentarios