La tercera edición de la Bienal de Flamenco de Cádiz, Jerez y los Puertos ha echado el telón. Un espectáculo de los alumnos de las academias de Araceli Arias, Víctor Raposo y Jaime Cala en El Puerto de Santa María, así como la presentación en Jerez de la portada del disco Una promesa de Juan Diego Mateos, clausuraron el pasado fin de semana una muestra por la que han pasado “más de 4.000 espectadores”.
“Esta Bienal de Flamenco ha venido a la provincia de Cádiz para quedarse”, sostiene su director, Mario González, máximo responsable de un programa de contenidos compuesto por espectáculos, exposiciones y conferencias que arroja “un balance positivo”, tras las vicisitudes que presentó la edición de 2021 “en la que aún padecíamos las medidas restrictivas del coronavirus”.
Por ello, agradecía “el esfuerzo de los diferentes ayuntamientos que han acogido eventos”, así como el apoyo recibido por parte las empresas privadas que “han vuelto a confiar en nosotros” y, sobre todo, de la Junta de Andalucía y la Diputación de Cádiz para que “en este 2023 se haya visto cómo la Bienal sigue creciendo, en número de ciudades, en espectáculos y en asistencia de espectadores”.
“Ya no podemos más que pensar en la próxima edición de 2025”, resaltaba González, subrayando que ha sido un honor “poder dedicar esta edición a Juanito Villar, un artista de referencia tanto por su trayectoria en el mundo del flamenco, como por el cariño que se le profesa en esta tierra” y a quien la organización le rendía un sincero y cariñoso homenaje el día 30 de octubre en el Palacio de Congresos de Cádiz. “Verlo emocionado ante su público, junto a sus compañeros, siempre quedará en el recuerdo de esta edición”, remataba.