El alivio térmico registrado este domingo en buena parte de España será breve. A partir del lunes, un nuevo descenso acusado de las temperaturas volverá a dejar valores propios de enero en zonas del norte y del interior peninsular, acompañado de un frente frío y una borrasca que entrarán por el noroeste y avanzarán hacia el resto del país.
La jornada del lunes estará marcada por lluvias intensas en Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco, norte de Navarra, Sierra de Madrid y sur de La Rioja, donde podrían superarse los 50 litros por metro cuadrado. También se prevén precipitaciones en la meseta norte —especialmente en Segovia, Soria y Burgos— y en Aragón, con acumulados de entre 10 y 15 litros por metro cuadrado en Zaragoza y el Pirineo oscense.
El frente recorrerá la Península durante el lunes y, ya en las últimas horas del día y la madrugada del martes, las lluvias podrían extenderse a Castilla-La Mancha, Andalucía y al resto de la Comunidad de Madrid.
A este episodio se sumará la entrada de aire ártico impulsado por un chorro polar, lo que provocará un descenso generalizado de las temperaturas en la mayor parte de la Península y Baleares. La Aemet anticipa una semana inusualmente fría para finales de noviembre.
Heladas en el interior
El viento también contribuirá a acentuar la sensación térmica, con rachas superiores a 70 km/h en el litoral cantábrico, sierras del este peninsular e interior de la Comunidad Valenciana. Según la Aemet, estos vientos del norte arrastrarán nubes hacia el Cantábrico, alto Ebro y Pirineos, donde las precipitaciones podrían convertirse en nieve a partir del martes.
A partir de ese día se esperan heladas en zonas del interior, especialmente en el norte y el este. Las mínimas caerán hasta los 0 °C en Ávila y rondarán 1 °C en Burgos, Cuenca, Palencia, Salamanca, Soria y Teruel. El miércoles se mantendrá el ambiente gélido, con valores que podrían llegar a –2 °C en León o Teruel y situarse en –1 °C en Ávila y Palencia. La Aemet señala que, quizá, a finales de semana las temperaturas comiencen a normalizarse.