El Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba ha vivido en las últimas horas uno de esos momentos que recuerdan la importancia de la humanización dentro de la atención sanitaria. La pequeña Araceli, una paciente del área de Pediatría, ha celebrado su primer cumpleaños en plena estancia hospitalaria, y el centro quiso convertir ese día en algo inolvidable para ella y para su familia.
“¡Nuestra paciente Araceli cumplió su primer año en el Hospital Universitario Reina Sofía y quisimos celebrarlo con ella y su familia!”, explicaba el propio hospital, que compartió la escena con emoción en sus redes sociales. Y no es para menos: la niña, todavía muy pequeña, expresó en su rostro una mezcla de sorpresa y ternura cuando el equipo médico y de enfermería comenzó a cantarle el tradicional “Cumpleaños feliz”. Su reacción lo dijo todo. Esa mirada llena de ilusión fue, para muchos de los presentes, el mejor regalo del día.
Además de la canción y la decoración, Araceli recibió varios regalos preparados especialmente para ella, un detalle con el que los profesionales del centro buscaban que, a pesar del ingreso, pudiera vivir un momento realmente especial. “¡Muchas felicidades, Araceli!”, añadieron desde el hospital en un mensaje cargado de cariño.
Humanización en hospitales
El gesto, que se suma a las acciones habituales del Hospital Infantil para hacer más llevadera la estancia de los menores, pone de relieve una vez más el compromiso de los hospitales andaluces con la humanización y el bienestar emocional de los pacientes más jóvenes. No es un caso aislado: muchos niños pasan largas temporadas hospitalizados, y el personal busca que esos días estén llenos de cercanía. Se espera para que tengan pequeños motivos para sonreír.
Una forma de recordar que, incluso en un entorno clínico, también hay espacio para la celebración, la sensibilidad y la atención personalizada. Un cumpleaños diferente, pero cargado de humanidad y de cariño.
