"Maricones, vais a conquistar el mundo", "ojalá os muráis, os voy a matar", son algunas de las lindezas que profirió un hombre a una pareja de homosexuales que se estaban besando en un parque de Almería, con el fin de "humillarles, menospreciarles y ofender su dignidad" debido a su orientación sexual. Hasta llegó a golpear en la cara a uno de ellos.
Por estos hechos, la Fiscalía Provincial de Almería va a solicitar 18 meses de prisión a un hombre acusado de atacar a la pareja. Tanto el Ministerio Público como la acusación particular que ejerce el abogado penalista Félix Fernández acusan al hombre de un delito contra los derechos fundamentales y libertades públicas, recogido dentro de los delitos de odio tipificados en el artículo 510 del Código Penal, así como por otro delito leve de lesiones y delito leve de amenazas.
Los hechos tuvieron lugar el 25 de abril del pasado año, cuando los afectados se encontraban en el parque cercano a la calle Manuel Azaña de Almería, junto al centro comercial Carrefour, sobre las 19.35 horas. El acusado, de unos 40 años, que cuenta con antecedentes y carece de residencia legal en el país, vio a los jóvenes cuando se besaban en los labios y se dirigió a ellos "de forma muy agresiva", con lo que "empezó a amendrentarles".
Una de las víctimas sacó su teléfono móvil para avisar a la policía de lo sucedido, momento en el que el acusado "corrió hacia él y le propinó un fuerte golpe en el rostro", de acuerdo con los hechos recogidos por la acusación, desde la que se detalla que a causa del golpe sufrió una "contusión facial y arañazos", con cinco días de perjudicio personal.
En el momento de ser identificado por la fuerza policial y "con la finalidad de seguir vejándoles por su orientación sexual", el acusado habría manifestado "a voces" para que lo escucharan los denunciantes: "No entiendo por qué me detenéis, son unos maricones de mierda".
La Fiscalía, que propone conmutar la pena de prisión por la expulsión del territorio nacional durante seis años al acusado en caso de ser condenado, también pide una multa de dos euros diarios por un periodo de 16 meses así como hasta seis años de alejamiento con respecto a las víctimas, a las que deberá indemnizar con un total de 3.000 euros a los dos por "daños morales". Y también reclama su inhabilitación para trabajar en el ámbito docente, deportivo y de tiempo libre durante un tiempo superior en tres años a la pena privativa de libertad que se le imponga en sentencia.
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