En una carta pastoral, el obispo diocesano, José Rico Pavés, invita a los sacerdotes de Asidoia-Jerez a dedicar una misa, el 31 de mayo, para que “nuestros legisladores reconozcan el derecho a la vida, se reabren las heridas y se termine con este drama”, del aborto.
La misiva se abre recordando la resolución del Tribunal Constitucional reconociendo el aborto como un derecho constitucional algo que, a juicio del prelado, “nos recuerda la necesidad de orar por la vida, en reparación por las heridas que provoca el drama del aborto, en las madres y en sus hijos, y por la conversión de los que participan”.
Cita a san Juan Pablo II, en su Encíclica Evangelium Vitae, en la que el anterior Papa expuso la urgencia de “una gran oración por la vida, que abarque al mundo entero. Que desde cada comunidad cristiana, desde cada grupo o asociación, desde cada familia y desde el corazón de cada creyente, con iniciativas extraordinarias y con la oración habitual, se eleve una súplica apasionada a Dios, Creador y amante de la vida”.
Con estos argumentos, Rico Pavés exhorta a los sacerdotes “a ofrecer la Misa del próximo 31 de Mayo” con esta intención de que “se reconozcan el derecho a la vida”.


