El Golfo de Cádiz ha experimentado tres terremotos en las últimas horas, dos de ellos de escasa intensidad, y un tercero registrado a las 13 horas de este miércoles de 3,3 en la escala Richter.
Los tres se han producido en un radio de un centenar de kilómetros, dentro del Atlántico, frente a las costas de Cádiz y Huelva.
El primero de los tres se produjo a la altura de Sanlúcar de Barrameda, a la medianoche cerca de las costas de Faro. Se produjo a una profundidad de 29 kilómetros con fuerza 1,6.
El segundo, un poco más al Norte, aún más cerca de Faro, a la altura prácticamente de Matalascañas, tenía una profundidad de 29 kilómetros y una magnitud de 1,6 y se ha producido de madrugada.
El tercero se ha producido a la altura de Tarifa, también en la vertical a la altura de Faro, a una profundidad de 25 kilómetros bajo tierra y con una magntiud de 3,3 en la escala Richter. Este ha sido a las 132:18 horas.
Asimismo, se han producido en los últimos tres días otros temblores cercanos. En Lisboa, este lunes se sintió uno de escala 4,4. Por otra parte, también la pasada madrugada, a la 1:19 horas, se produjo en Larache, en la costa marroquí, entre Tánger y Rabat, otro temblor a una profundidad de tres kilómetros con magnitud 2,7.
La actividad sísmica es habitual en esta zona. El Instituto Geográfico Nacional mantiene vigilancia constante de los temblores de tierra en nuestro país y el entorno, sin que haya mostrado ningún motivo para la alarma. El más fuerte del Golfo de Cádiz registrado en los pasados 30 días fue el temblor de 3,7 el 24 de enero.
En Andalucía, la zona más caliente de terremotos es el entorno de la provincia de Granada, que sufrió una crisis hace cuatro años que se mantuvo durante semanas, y que se hacían notar con fuerza, si bien sin peligro para las personas, y con apenas algunos daños en inmuebles.
