Máxima tensión en un 'wok' de Málaga: un cliente se lía a puñetazos y patadas dentro del local

Momentos de máxima tensión se han vivido en un wok de Málaga donde un cliente se ha liado a puñetazos dentro del local.

Una vigilante de seguridad y varios trabajadores también han mediado en la pelea que ha tenido lugar dentro del establecimiento ante la atónita mirada de muchos clientes. 

Parece que los últimos muslitos de pollo thai se los llevó a cara perro. 🤣🤣🤣

Las cabezas están fatá.

City Wok - Avenida Velazquez pic.twitter.com/yXWfRGk5WM

— 👨🏻‍💻 Paco Vivar ( •_•)💬 7️⃣ (@frajpv) May 24, 2023

La discusión se inicia en una zona del wok con uno de los clientes como protagonista, pero al final es otro hombre el que protagoniza la lamentable escena. El individuo que inicia la pelea, en un momento del enfrentamiento, llega a coger un palo. 

"Parece que los últimos muslitos de pollo thai se los llevó a cara de perro. Las cabezas están fatal", ha comentado el usuario que ha subido a redes el vídeo del enfrentamiento.

Desde Citywok, el wok en cuestión, han querido puntualizar que "la situación se inició debido a la actitud de un niño que mostró señales de aversión hacia otro niño de raza negra en una mesa cercana. La familia del niño afectado solicitó a la otra familia que educaran a su hijo en el respeto y los modales. En ese momento, el padre del niño agresor defendió la conducta de su hijo y minimizó el acoso que estaba ocurriendo. Como respuesta, el niño de raza negra también hizo una broma hacia el niño agresor".

Añaden desde el establecimiento que "desafortunadamente, esta serie de eventos llevó a que los padres de ambos niños se involucraran en una confrontación física. Desde la perspectiva de un observador imparcial, esto es resultado de la desigualdad y el racismo. Lo que debemos promover es la educación, en lugar de crear un ambiente de terror en el que los clientes agredan a los empleados. Sin embargo, quiero aclarar que en ningún momento la agresión se dirigió hacia un empleado del establecimiento. Las grabaciones muestran claramente que el equipo del restaurante intentó calmar la situación y que la intervención policial se produjo entre dos clientes adultos".