El Jueves Santo, la hermandad de la Concha volvía a su templo bajo la atenta mirada de una multitud que disfrutaba de la Semana Santa más esperada de la historia. Pero la calma duró poco en la plaza de la Concepción cuando, sobre las doce de la noche, alguien alarmó a los presentes.
Un hombre, de 66 años, se encontraba indispuesto en el suelo. Según Ideal, se había desplomado y necesitaba ayuda urgente. De inmediato, dieron el aviso y varios voluntarios de Protección Civil abrieron el paso para acceder a las puertas del Monasterio de la Concepción.
Tras más de 40 minutos realizandole maniobras de reanimación, el hombre recobró la consciencia en medio de la gente. La agrupación logró salvarle la vida y evitó que la historia terminara con final feliz.