En ocasiones, las noticias más estremecedoras llegan desde entornos cotidianos, como un piso compartido en una zona urbana. Eso es lo que ha ocurrido en Valencia, donde un hombre ha sido detenido acusado de matar a golpes con una mancuerna a su compañero de piso. Fuentes de la investigación han confirmado que el arrestado habría sufrido un brote relacionado con la enfermedad mental que padecía, un episodio que derivó en un suceso violento y fatal.
El incidente se registró alrededor de las 21.30 horas en una vivienda de la Plaza Arturo Piera, donde convivían ambos hombres. Fue un vecino quien alertó a la Sala Cimacc 091 tras escuchar ruidos que interpretó como una pelea. Varias patrullas se desplazaron al lugar y accedieron al domicilio por el balcón mediante una cesta de bomberos ante la imposibilidad de entrar por la puerta principal.
Arrodillado y cubierto de sangre
Una vez dentro, los agentes encontraron al hombre fallecido en el pasillo y, junto a él, al presunto autor de la agresión, arrodillado y cubierto de sangre. El detenido sostenía en una mano el mango de una mancuerna, objeto que, según los investigadores, habría utilizado para propinar los golpes mortales. La víctima presentaba múltiples heridas y un sangrado abundante en la cara y la cabeza, lo que evidenciaba la violencia del ataque.
Los agentes procedieron a la detención inmediata del sospechoso, que fue trasladado a un centro sanitario. Los servicios médicos confirmaron el fallecimiento del hombre agredido y atendieron al arrestado por contusiones y un traumatismo craneoencefálico. Hasta el lugar se desplazaron una unidad del SAMU y un equipo de Atención Primaria, tal como indicaron desde el Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU).
El suceso ha quedado ahora en manos del Grupo de Homicidios de la Policía Nacional y de la Policía Científica de la Jefatura Superior de la Comunitat, que han asumido la investigación para esclarecer con precisión lo ocurrido dentro de la vivienda. La Policía trabaja con la hipótesis de que el presunto agresor actuó bajo un episodio psicótico, aunque aún deben completarse los informes periciales y las declaraciones oficiales para determinar las circunstancias exactas.
