El llamado Castillo de Zahara de la Sierra es, en realidad, una torre del homenaje. Construida por Rodrigo Ponce de León a finales del siglo XV, su posición estratégica trascendería en el tiempo y fue refugio de las tropas francesas durante la invasión napoleónica del XIX. Un punto desde el que divisar muchísima información de los alrededores. Se ven tres provincias: Málaga, Cádiz e incluso Sevilla.
En la preparación de un próximo centro de interpretación sobre la villa medieval, puesto en marcha por el equipo de ARQ Patrimonio, con el arqueólogo Luis Cobos, la torre del homenaje ha revelado un secreto que corrobora una hipótesis: debajo de la fortificación cristiana había otra construida por los musulmanes. La razón: la presencia de un aljibe enterrado en la planta baja que ya ha asomado en los trabajos. "No sabíamos con certeza qué ibamos a encontrar", destaca Cobos.
Zahara de la Sierra estuvo poblada por musulmanes desde aproximadamente el siglo X. En 1407 fue tomada por las huestes castellanas, retomada de nuevo -con eso de estar en frontera- por los nazaríes en 1481, y dos años después vuelta a tomar por los Reyes Católicos, con el marqués de Zahara en la batalla, Rodrigo Ponce de León. "Aquí empezó la última Guerra con Granada que supondría un avance de casi diez años hasta la Toma de 1492", explica Cobos.
"Desde hace años ya barajábamos que donde está la torre del homenaje habría alguna construcción similar de los nazarías, pero no lo sabíamos con certeza hasta ahora. No podemos decir aún si fue una torre, pero posiblemente sí", aclara el arqueólogo.
La actual torre del homenaje o castillo data de finales del XV, con "una planta alta de ventalaes abiertos, más palaciega que militar, sobre todo en esa zona alta. Además, tiene características como la estructura de la mampostería que dejan claro que es de esa época. No sabemos las dimensiones que pudo tener la construcción anterior, si bien hay indicios por los muros. El aljibe encontrado tenía el fin de proveer de agua en caso de asedio largo".
La construcción de la torre no tuvo efectos militares porque el avance, a diferencia de lo que había ocurrido antes de su construcción, fue el definitivo y último episodio del periodo de Reconquista, el término más común cuando se habla de la victoria de los reinos cristianos. "La frontera entre el Reino de Granada y Castilla se fue acercando cada vez más hasta acabar en 1492. Es con la toma de Zahara cuando los Reyes Católicos deciden proseguir el avance".
Ese aljibe nazarí estaba en la base de esa construcción previa, pero, en principio, no habría sido usado por los cristianos, porque tenían otros alrededor de la torre.
La situación estratégica de Zahara convirtió a esas peñas en una plaza importante desde la época romana, al menos. "Actualmente es el recuerdo de una Guerra de Granada que sería la última, pero también de la fusión de dos culturas". Un secreto que pronto, dentro de unos meses, podrá visitarse ya convertido en centro de interpretación, con paneles que recogerán los nuevos hallazgos.
El equipo de ARQ Patrimonio también encontró los candelabros del II de Zahara de la Sierra, y ha protagonizado otros importantes hallazgos en la provincia de Cádiz, una zona tan histórica y que sigue escondiendo tantísimos tesoros que solo esperan ser desenterrados.
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